MÚNICH (ALEMANIA), 17 Feb. (DPA/EP) -
El primer ministro de Turquía, Binali Yildirim, ha asegurado este sábado que las relaciones de su país con Alemania se están normalizando, unas declaraciones pronunciadas horas después de la excarcelación del periodista germanoturco Deniz Yücel, quien ha pasado un año en prisión en Estambul en medio de tensiones diplomáticas entre Berlín y Ankara.
"Casos aislados como el de Deniz Yücel no tienen la fuerza para interferir en nuestras relaciones o destruirlas", ha apuntado Yildirim en una entrevista con la agencia de noticias DPA durante su estancia en Alemania para asistir a la Conferencia de Seguridad de Múnich.
Yildirim ha instado al Gobierno alemán a enterrar las desavenencias del pasado. "Las elecciones (en Alemania) pasaron, el referéndum (constitucional en Turquía) pasó y estas dificultades ya son parte del pasado", ha subrayado.
Yücel, corresponsal del diario alemán 'Die Welt', fue detenido el 14 de febrero de 2017 en Estambul. Poco después se dictó prisión preventiva por cargos de terrorismo, pero finalmente la Fiscalía no ha presentado cargos en su contra.
Desde su arresto empeoraron las ya tensas relaciones entre Berlín y Ankara. El Gobierno de la canciller Angela Merkel había pedido en numerosas ocasiones su liberación y la canciller se implicó especialmente en este caso hasta recibir personalmente a la esposa del periodista, Dilek Mayatürk-Yücel.
Yildirim ha añadido que será necesario algo de tiempo hasta que sean resueltas las diferencias entre ambos países. Yücel llegó a Berlín a última hora del viernes. Un tribunal turco ordenó su puesta en libertad pese a aceptar un pedido de la fiscalía de 18 años de prisión por presunta "propaganda para una organización terrorista" y por incitar "al odio y a la hostilidad".
"Mi detención no tiene nada que ver con la justicia ni con el imperio de la ley ni tampoco tiene que ver con ello mi puesta en libertad", ha declarado Yücel. "Por supuesto que estoy contento, pero queda un amargo sabor de boca", ha matizado.
Otros cinco alemanes están detenidos en Turquía por motivos políticos. Estos casos tampoco deberían perjudicar los lazos entre ambos países, según las declaraciones de Yildirim a DPA. Algunos de ellos estuvieron en contacto con quienes orquestaron el fallido intento de golpe de Estado contra el presidente Recep Tayyip Erdogan de julio de 2016.
