MOSCÚ, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -
El residente de Rusia, Vladimir Putin, ha asegurado que la "agresión" lanzada en Siria por las fuerzas estadounidenses, francesas y británicas representa una violación de los principios internacionales y ha acusado directamente a Estados Unidos de provocar el "sufrimiento" de la población siria y ayudar a la causa terrorista.
Putin, que ha solicitado una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU para analizar este asunto, ha condenado "en los términos más enérgicos" los bombardeos lanzados este sábado de madrugada sobre instalaciones del régimen de Bashar al Assad, del que Moscú es aliado por considerar que está "en la primera línea de la lucha contra el terrorismo".
"Con sus acciones, Estados Unidos agrava la situación humanitaria en Siria, causa sufrimiento a la población civil, favorece a los terroristas que llevan siete años martirizando al pueblo sirio y provoca una nueva ola de refugiados desde el país árabe y la región en su conjunto", ha denunciado Putin, según la agencia de noticias oficial Sputnik.
Las autoridades de Estados Unidos, Reino Unido y Francia han justificado la operación como una respuesta al supuesto ataque químico perpetrado el 7 de abril en la localidad siria de Duma, a las afueras de Damasco, y en el que murieron más de 70 personas, según cifras del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
A pesar de que las tres potencias aliadas han señalado directamente a Al Assad como responsable, Rusia ha denunciado que todo se trata de un "montaje", una tesis en la que Putin también ha insistido este sábado.
"Ni un solo vecino de la zona ha confirmado el ataque químico", ha esgrimido el mandatario ruso, que también ha asegurado que los "expertos militares" que han visitado a Duma "no han hallado rastros que apunten al empleo de cloro o de otro agente químico".
Putin ha advertido de que la escalada militar acarreará "un efecto destructivo" para el conjunto de las relaciones internacionales y ha apuntado que "la historia pondrá todo en su sitio". En este sentido, ha apostillado que Washington ya se vio abocado a asumir la responsabilidad de "las represiones sangrientas en Yugoslavia, Irak y Libia".
