Pyongyang advierte de que "no puede quedarse cruzado de brazos"

Actualizado: viernes, 30 mayo 2014 9:04

MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -

   El ministro de Exteriores de Corea del Norte, Ri Su Yong, ha cargado duramente este viernes contra los gobiernos de Corea del Sur y Estados Unidos por sus maniobras militares conjuntas, en sus primeras declaraciones oficiales desde su nombramiento para el cargo en abril.

   Ri ha asegurado que dichas maniobras "y otros actos provocativos" han provocado que Pyongyang "no pueda quedarse cruzado de brazos", si bien no ha dado detalles sobre las posibles acciones que llevaría a cabo el Gobierno norcoreano en respuesta.

   Las autoridades norcoreanas han protestado en numerosas ocasiones contra las maniobras conjuntas entre Washington y Seúl, que, por contra, argumentan que las mismas tienen una finalidad únicamente defensiva.

   El año pasado, Pyongyang aseguró que respondería a cualquier movimiento hostil atacando Estados Unidos, Japón y Corea del Sur, desatando una recolocación de tropas en la península coreana y varios meses de acusaciones cruzadas.

   Además, en marzo disparó centenares de misiles de corto alcance en medio de últimas maniobras, lo que provocó la respuesta de Corea del Sur, si bien no se registraron víctimas.

   Ambas Coreas permanecen en estado de guerra después de que el conflicto que mantuvieron entre 1950 y 1953 se saldara con un alto el fuego con una zona desmilitarizada alrededor del paralelo 38 y sin la firma de un tratado de paz.

   Por otra parte, Ri ha criticado a Estados Unidos y otros países occidentales por atacar a Pyongyang en base al pobre estado de los Derechos Humanos en el país, asegurando que se trata de un intento de acabar con el sistema social norcoreano.

   El Consejo de Derechos Humanos de la ONU pidió en marzo al Consejo de Seguridad que haga rendir cuentas los que han cometido los crímenes contra la Humanidad documentados en Corea del Norte.

   El organismo, con sede en Ginebra, aprobó por 30 votos a favor, seis en contra y once abstenciones, la resolución presentada por Japón y la UE. Asimismo, amplió el mandato de su investigador sobre Derechos Humanos en Corea del Norte, Marzuki Darusman, un año más y acordó establecer una oficina sobre el terreno para ayudarle a recabar más pruebas y testimonios.