MADRID, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los rebeldes de República Democrática del Congo (RDC), fieles al general Laurent Nkunda, pidieron ayer al Gobierno que comiencen las negociaciones de paz para solucionar la crisis, según informó la cadena británica BBC.
Hasta el momento el presidente de RDC, Joseph Kabila, ha descartado cualquier tipo de conversación con Nkunda y se ha limitado a repetir el aviso de que cese la rebelión. Kabila pretende que los rebeldes se unan al Ejército. Los cerca de 8.000 insurgentes que se calcula que hay en la región, sin embargo, han hecho recular a los 20.000 soldados gubernamentales, recuperando el terreno que perdieron la semana pasada.
Mientras, el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, pidió a los rebeldes que depusieran las armas y a ambos bandos que protegieran a los civiles atrapados en mitad del conflicto bélico. Ban mostró su "profunda preocupación" por los cerca de 400.000 civiles desplazados.
Nkunda reclama que se defienda la población tutsi del Congo de los Hutu, rebeldes ruandeses, que viven en el este de RDC desde el genocidio que sufrió Ruanda en 1994.
'SOLUCIÓN POLÍTICA'
El portavoz de los rebeldes, Rene Abandi, manifestó que quieren negociar porque son ellos quienes llevan la delantera y desean que el Gobierno escuche su propuesta para solucionar el conflicto del este de RDC. "Ahora que hemos ganado, deseamos una solución política", aseguró, "para acabar con la discriminación a algunas comunidades y para organizar un Ejército moderno".
Abandi declaró también que creen en una solución "política y no militar", a pesar de tener una situación "favorable" en el territorio. El representante aprovechó para desmentir las acusaciones vertidas sobra los rebeldes, que les culpaban de reclutar niños soldado a la fuerza.
El alto comisario para los refugiados de la ONU, Antonio Guterres, empezó ayer una visita de cinco días a la región, para valorar la situación.
