Los rebeldes acusan al Ejército sursudanés de arrasar Leer, localidad natal de Machar

Actualizado: domingo, 2 febrero 2014 22:23

YUBA, 2 Feb. (Reuters/EP) -

Los rebeldes sursudaneses han acusado al Ejército de arrasar Leer, en el norte del país, la localidad del líder sublevado y exvicepresidente Riek Machar, masacrando incluso a mujeres y niños. Además, aseguran que los militares han contado con la ayuda de milicianos aliados del Ejército venidos del otro lado de la frontera con Sudán.

El portavoz rebelde, Lul Ruai Koang, ha denunciado el ataque del Ejército en flagrante violación del alto el fuego acordado entre ambas partes. Además, ha asegurado que en el asalto participaron milicianos del Movimiento Justicia e Igualdad, una guerrilla sudanesa.

Mientras, un portavoz del Ejército ha asegurado que no cuentan con información alguna sobre combates en Leer. La ONG Médicos Sin Fronteras ha informado de que más de 200 de sus trabajadores fueron obligados a marcharse la semana pasada de Leer por falta de seguridad.

Este domingo ha llegado al país la avanzadilla del equipo de observadores del alto el fuego en Sudán del Sur enviado por el grupo regional de mediadores de paz. A partir del lunes examinarán la situación sobre el terreno en los potenciales focos donde se podrían reanudar las hostilidades entre el Ejército y los rebeldes liderados por Machar.

El equipo pertenece al grupo regional de mediadores de la Autoridad Intergubernamental de Desarrollo (IGAD), un bloque integrado por Etiopía, Kenia, Somalia, Sudán, Uganda, Yibuti, Eritrea y Sudán del Sur, y mediador en las conversaciones del alto el fuego firmado por el presidente del Gobierno sursudanés, Salva Kiir, y los rebeldes el pasado 23 de enero.

La Misión de Naciones Unidas en Sudán del Sur (UNMISS) también ha ofrecido su apoyo de cara a la supervisión del cese al fuego si fuese necesario, ha asegurado el subsecretario general de la ONU, Jan Eliasson.

Miles de personas han muerto y más de un millón se han visto obligadas a huir de sus hogares desde que estallaron los enfrentamientos a mediados de diciembre. Este conflicto ha llevado a Sudán del Sur, que declaró su independencia en 2011, al borde de la guerra civil.

Cuando estallaron las disputas, el Gobierno sursudanés detuvo a once políticos acusados de intentar organizar un golpe de Estado para derrocar a Kiir, cargos que los acusados han negado. Los seguidores de Machar han exigido la liberación de todos los detenidos, pero no lo han propuesto como condición sine qua non para el alto el fuego.

Las negociaciones de paz se reanudarán el próximo 7 de febrero, pero un alto cargo sursudanés ha reconocido que podrían tener problemas a la hora de concretar algún avance mientras sigan detenidos los cuatro políticos, entre los que se encuentra el exsecretario general del partido de Kiir.