Los rebeldes FDLR continúan "matando, violando, incendiando y saqueando" en Kivu Norte, según las autoridades

Actualizado: lunes, 3 mayo 2010 11:14


MADRID, 3 May. (EUROPA PRESS) -

Los rebeldes de las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FLDR) continúan "matando, violando, incendiando y saqueando" en la provincia de Kivu Norte, en el este de la República Democrática del Congo (RDC), según denunciaron las autoridades locales.

Las FDLR siguen siendo "muy operativas y emprendedoras" en la zona de Lubero, según declaró este domingo el administrador de este territorio, Dominique Bofondo, a Radio Okapi, emisora vinculada a la misión de la ONU (MONUC).

El territorio de Lubero se encuentra a unos 320 kilómetros al norte de Goma, capital de la provincia. Según Bofondo, los rebeldes de FDLR operan "a la vista de todo el mundo". "Llevan a cabo ataques por sorpresa en las poblaciones, matan, violan, queman las casas y las cabañas y saquean", denunció.

Al respecto, recordó que en la noche del 30 de abril al 1 de mayo, las FDLR mataron a una persona e hirieron a otras cinco en una localidad de Lubero. "A continuación quemaron ocho cabañas", añadió. Este ataque siguió a otro cometido el 29 de abril, en el que los rebeldes ruandeses quemaron una veintena de casas en Kasindi, también en Kivu Norte.

Según los representantes de la sociedad civil de Lubero, la ausencia de un contingente importante de militares de las Fuerzas Armadas de la RDC en el territorio ha contribuido al recrudecimiento de los ataques de las FDLR.

Por ello, Bofondo ha pedido a las autoridades provinciales y al Gobierno de Kinshasa que refuerzen la presencia militar en la zona y ha reclamado a la MONUC que apoye a las Fuerzas Armadas en la neutralización de las FDLR.

Los rebeldes de las FDLR, de extracción hutu, están acusados de participar en el genocidio ruandés de 1994. Ese mismo año se instalaron en el este de RDC, tras la victoria militar y la llegada al poder del 'señor de la guerra' tutsi y actual presidente ruandés, Paul Kagame.

Desde hace poco más de un año, el Ejército lleva a cabo una campaña contra las FDLR con el apoyo de la MONUC. Todas las partes han sido acusadas de graves violaciones de Derechos Humanos.