MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los ejércitos de Armenia y Azerbaiyán han protagonizado este jueves nuevos enfrentamientos en la frontera, de los que se han acusado mutuamente, sin que por el momento haya informaciones sobre muertos a causa de estos renovados combates.
El Ministerio de Defensa azerí ha confirmado en un comunicado "operaciones militares activas" en la región de Tovuz y ha confirmado la muerte de un militar durante las mismas. Asimismo, ha dicho que "en los combates hasta la fecha han muerto 20 militares (...) enemigos".
Por su parte, el Ministerio de Defensa armenio ha denunciado un "intento de infiltración" por parte del Ejército azerí en esta zona de la frontera. "Tras una cruenta batalla, el oponente, que ha sufrido bajas, ha sido repelido. Armenia no ha sufrido pérdidas", ha recalcado.
El presidente de la Asamblea Parlamentaria de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), George Tsereteli, ha pedido a ambos países que reduzcan las tensiones y participen en "negociaciones sustanciales", según un comunicado publicado por el organismo.
"Los enfrentamientos armados de esta semana son un recrudecimiento grave del conflicto y podrían amenazar las negociaciones de paz que han tenido lugar bajo los auspicios de los copresidentes del Grupo de Minsk de la OSCE", ha advertido.
Por ello, ha pedido a las partes "que hagan uso de todas las herramientas de desescalada, incluidos los canales de comunicación directa existentes y los canales informales de comunicación ofrecidos por la Asamblea Parlamentaria de la OSCE".
Tsereteli ha alertado además del impacto de los combates en los esfuerzos para hacer frente a la pandemia de coronavirus y ha agregado que el conflicto "está creando unas condiciones mucho más difíciles para la gente de a pie, que demasiado a menudo son las que más sufren en la guerra".
Armenia y Azerbaiyán viven enemistados desde el inicio del conflicto de Nagorno-Karabaj, en 1988, cuando este enclave, poblado en su mayoría por armenios y con apoyo del Gobierno de Armenia, decidió independizarse de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán. El Gobierno azerí perdió el control sobre Nagorno-Karabaj y siete distritos adyacentes tras una escalada de hostilidades en el período de 1992 a 1994.
Azerbaiyán insiste en recuperar su integridad territorial, mientras que Armenia defiende los intereses de la autoproclamada República de Nagorno-Karabaj. El conflicto vivió una escalada de violencia en abril de 2016 y, si bien se logró pactar un nuevo alto el fuego, se siguen registrando enfrentamientos esporádicos en la zona fronteriza.
