Reino Unido.- Competencia británica dice que romper el monopolio de BAA es una posibilidad, pero no inminente

Actualizado: lunes, 6 agosto 2007 19:31

LONDRES, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Comisión de Competencia británica señaló hoy que acabar con el monopolio del que goza el gestor aeroportuario BAA (Ferrovial) en los aeródromos británicos "es una posibilidad" desde que se abrió la investigación a la compañía pero "no es inminente", según indicó un portavoz a Europa Press.

Las conclusiones de la Comisión de Competencia, que se publicarán esta semana, llegan después de que la oficina británica del consumidor (OFT, Office of Fair Trade) remitiese en marzo un expediente preliminar acerca de la gestión de BAA en los aeropuertos británicos, en el que se recomendaba entre otras cosas que el operador controlado por Ferrovial abra a la competencia los aeródromos del Sureste de Inglaterra.

El anuncio de la Comisión será "simplemente un informe en el que se expondrán las conclusiones de la investigación y las cuestiones y áreas que se examinarán". "Evidentemente, dependiendo del veredicto en temas como éste, la gente podrá sacar conclusiones justificadamente sobre qué debería ocurrir como resultado de la investigación, pero estamos lejos de este punto en este momento", explicaron fuentes de la Comisión.

En este sentido, destacaron que la situación actual se encuentra en un nivel de conclusiones iniciales y prevén que de cara al próximo año se puedan discutir las posibles soluciones para terminar con las continuas quejas de los clientes de BAA.

El análisis de la OFT encontró "evidencia de escasa satisfacción de clientes" y aunque destacaba las "significativas inversiones" previstas en el Sureste, advirtió de que "sin competitividad las inversiones podrían ser ineficaces", ya que no servirían más que para encarecer el billete de los pasajeros.

Por su parte, el operador aeroportuario británico BAA (Ferrovial), que considera el informe que hará público Competencia esta semana como "muy preliminar", achaca la experiencia "insatisfactoria" que puedan tener los pasajeros en los aeropuertos británicos "a la falta de capacidad" de los mismos y no a la estructura de la sociedad, respondiendo así a las propuestas enviadas por parte de la OFT (Office Fair Trading) a la Comisión de Competencia.