PARIS, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
En un episodio más de la polémica que enfrenta a las autoridades de Ruanda y Francia, el presidente el país africano, Paul Kagamé, acusó hoy al primer ministro galo, Dominique de Villepin, de haber estado "implicado" en el genocidio de 1994 que causó la muerte de cerca de un millón de tutsis en Ruanda.
"Hay responsables franceses que estuvieron directamente implicados en aquella época y que siguen con vida, notablemente el primer ministro de Francia, que era director de gabinete del ministro de Asuntos Exteriores", condenó Kagamé, en declaraciones a la televisión británica BBC World.
"Es Francia la que apoyó a las fuerzas que cometieron el genocidio, las entrenó, las armó y participó en los combates contra las tropas que intentaron impedir la masacre", denunció Kagamé, aprovechando su visita a Reino Unido.
El pasado 23 de noviembre, la Justicia francesa decretó nueve órdenes internacionales de arresto contra allegados del presidente ruandés por su presunta implicación en el atentado contra el ex jefe del Estado Habyarimana, el 6 de abril de 1994.
Ruanda decidió romper, acto seguido, relaciones diplomáticas con Francia. Estas nueve personas, entre ellas el jefe del Estado Mayor ruandés, James Kabarebe, pueden ser detenidas en cualquiera de los países de Interpol por "asesinato" o "complicidad con un asesinato".
El juez francés que investiga el derribo del avión debido a que la tripulación era de nacionalidad francesa, Jean-Louis Bruguiere, recomendó que Kagamé sea perseguido y juzgado por el Tribunal Penal Internacional para Ruanda (TPIR), como el posible mandatario de que se atentase contra el avión presidencial. Al tratarse de un jefe de Estado en el cargo, la legislación internacional impide que la Justicia francesa pueda juzgarlo.
