R.Unido.- Browne pide perdón por no impedir la venta de historias de los marineros británicos y anuncia investigaciones

Actualizado: lunes, 16 abril 2007 23:30

LONDRES, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -

El secretario de Defensa británico, Des Browne, pidió hoy disculpas por no haber impedido a los marineros británicos detenidos durante 13 días por las autoridades iraníes, a pesar dijo de que dicha autorización por parte de las autoridades de La Marina y del Ministerio que dirige se hizo de "buena fe", al tiempo que anunció la apertura de una investigación del caso.

Browne admitió ante la Cámara de los Comunes que "lamentó profundamente" el "error" cometido, así como cualquier perjuicio inferido a las Fuerzas Armadas británicas tras dicha autorización, informa la cadena británica 'BBC'.

Asimismo, el titular de Defensa anunció la apertura de una investigación sobre la decisión adoptada, así como otra investigación diferenciada pero paralela sobre las circunstancias de la captura de los 15 marineros británicos e incidió en un comunicado oficial en que no se emitió "ninguna disculpa ni ningún acuerdo" con Irán para garantizar su puesta en libertad.

La investigación sobre la manera en que se gestionó la autorización de la venta de las historias de los marineros a los medios de comunicación estará encabezada por un alto cargo militar y un funcionario del Ministerio de Defensa, ambos sin relación con la decisión adoptada, y que no constituirá "una caza de brujas", señaló Browne.

Respecto a la investigación sobre la captura del personal naval en el estuario de Shatt al Arab, explicó que estaría dirigida por el gobernador general de Gibraltar, el general de la Marina Real Sir Rob Fulto, tendrá una duración de seis semanas y al término de la misma será presentada a los parlamentarios.

Es importante, destacó Browne, que "el Parlamento reciba la respuesta que se merece y, aún más importante, aprenda las lecciones para el futuro" y, a pesar de pedir perdón de forma pública, subrayó que no acepta que "la operación fuera una humillación para la Marina Real".

Por su parte, el portavoz del primer ministro, Tony Blair, admitió, citado por Associated Press, que la autorización de vender las historias de los marineros a los medios no fue una buena idea, aunque subrayó que Blair y las Fuerzas Armadas mantienen la confianza en Browne.

"El punto esencial es que nuestros 15 marineros fueron liberados y que fueron liberados sin ningún acuerdo", insistió, apelando al anonimato. "Des Browne ha dicho de manera abierta y sincera que si fuera preguntado hoy por la decisión tomada por la Marina Real, habría tomado una decisión distinta", agregó.

El líder del oposición conservadora, David Cameron, acusó al Ministerio de Defensa de "conceder la importancia primero a un buen titular, y a las relaciones públicas", aunque denunció que las autoridades británicas "estaban poniendo en peligro la reputación" de las Fuerzas Armadas, dijo, "a largo plazo".

Por su parte, el subsecretario de Defensa, Liam Fox, incidió en que en otro momento político "la resignación de un secretario de Estado que supervisó tal fiasco humillante por su parte habría sido inevitable". "¿Nadie en el Gobierno se siente responsable de la humillación nacional que hemos sufrido en manos del régimen pario de Irán?", se preguntó, tachando de "imperdonable" la autorización.