R.Unido.- Cautela entre los partidos ante unos sondeos interpretados por los 'tories' como un "claro rechazo" a Brown

Actualizado: viernes, 7 mayo 2010 2:21

LONDRES, 7 May. (Especial para EUROPA PRESS, Eva Martínez Millán) -

Los tres principales partidos británicos han optado por la cautela ante la primera encuesta de las elecciones celebradas este jueves, que revela que los conservadores serían el grupo mayoritario en el Parlamento, con 307 escaños, a 19 de la hegemonía; mientras que los laboristas dejarían de contar con la mayor representación en la Cámara de los Comunes, al perder 97 asientos, como consecuencia de lo que los 'tories' han considerado ya un "claro rechazo" al primer ministro, Gordon Brown, en su estreno como candidato.

El recuento en la mayoría de las 649 circunscripciones ha comenzado ya, tras el cierre de los colegios a las 22.00 horas (una más en la Península), y algunas han comenzado ya a declarar resultados oficiales. En la primera plaza en confirmarlos, los laboristas se aseguraron la silla que ostentaban, si bien este plazo de escrutinio está siendo aprovechado por destacadas figuras de las tres fuerzas principales para comenzar una carrera estratégica para interpretar las consecuencias del sondeo realizado para las principales televisiones de Reino Unido, BBC, Sky e ITV.

Los liberaldemócratas, por su parte, habrían también visto una reducción de su presencia en el nuevo Legislativo en hasta tres asientos, ya que quedarían con 59, a pesar de haber constituido durante la campaña uno de los grandes revulsivos, al punto de poner en cuestión el tradicional bipartidismo de la política de Reino Unido. Aún así, consideran que la encuesta está planteada para un sistema de dos formaciones y no recogería adecuadamente su saldo en los comicios de ayer.

Sin embargo, por el momento, la posición más complicada es para los laboristas, que habrían perdido la mayoría absoluta que ostentaban desde que Tony Blair los aupase al poder en 1997. Por el momento, la vicelíder del partido, Harriet Harman, se ha limitado a subrayar que los resultados anunciados no darían el "Gobierno fuerte" que, según ella, necesita el país.

Una declaración que, en ausencia de una fuerza mayoritaria en Westminster, ha sido interpretada como una posible gran coalición entre con los liberaldemócratas, en función de cómo queden los porcentajes de voto. En cualquier caso, de confirmarse las cifras avanzadas por la demoscopia, Gordon Brown sería responsable de los peores resultados del partido desde 1983, cuando Margaret Thatcher consiguió su segunda mayoría absoluta.

EQUILIBRIOS

No obstante, los equilibrios de poder obligan a revisar el número de papeletas obtenidas por cada formación, puesto que el peculiar modelo electoral británico permite que el apoyo popular no tenga por qué reflejarse necesariamente en el número de escaños. La representación responde a un diputado por circunscripción y, para conseguir el acta, el ganador únicamente precisa obtener una sola papeleta más que sus rivales.

Aun así, de confirmarse las previsiones, la presión sobre Gordon Brown para que dimita aumentaría. La norma en Reino Unido establece que, si un partido consigue más de la mitad de los votos, la jornada posterior a las elecciones, su líder es convocado por la Reina para que ésta le encargue formar Gobierno. Desde 1974 había venido aconteciendo de esta manera, puesto que, desde aquel año, la Cámara de los Comunes sólo había venido registrando mayorías absolutas.

No obstante, la falta de hegemonías que, según la primera encuesta, daría esta cita del 6 de mayo, autorizaría a Brown a continuar en Downing Street hasta que haya perspectivas de formación de un Gobierno, una apuesta que, en el último precedente, hace 36 años, fue la elegida por el por entonces primer ministro, Edward Heath, a pesar de haber perdido las elecciones. En aquella ocasión, la debilidad del Gobierno que salió de las elecciones de febrero motivó una nueva convocatoria electoral en otoño del mismo año.