LONDRES, 6 Abr. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Eva Martínez Millán) -
La terminal 5 del aeropuerto londinense de Heathrow mantuvo hoy la dinámica de cancelación de vuelos que la ha caracterizado desde su apertura oficial hace once días, pese a que ayer esperaba empezar a operar con normalidad, y anuló más de 60, esta vez, debido a la nieve con la que esta mañana amaneció la capital británica.
De esta forma, el desastre sigue reinando en las instalaciones gestionadas por BAA, del grupo español Ferrovial, desde las que opera en exclusiva British Airways, que prometió una revolución en la velocidad de moviemiento de los pasajeros en el nuevo edificio, que supuso una inversión de unos 6.000 millones de euros y en torno a cinco años de trabajo.
Así, la compañía británica reconoció que ha tenido que anular 31 despegues y el mismo número de aterrizajes y avanzó que las esperas aumentarán en función de la intensidad de la nieve, que ha llevado a los responsables del control del tráfico aéreo a reducir la frecuencia de operación en las pistas.
Además, los manipuladores del equipaje se vieron obligados a trabajar a lo largo de la pasada noche para intentar solventar los problemas generados por un fallo informático del sistema de gestión de las maletas que, no obstante, ya ha sido resuelto y ha permitido al mecanismo funcionar con normalidad, según un portavoz de la aerolínea.
Además, dos pistas hubieron de cerrarse durante un tiempo para retirar las placas de hielo ocasionadas por la nieve, lo que llevó a recortar el número de despegues por hora, mientras que, por lo que respecta a los retrasos, desde BA recordaron que la gestión manual para cada vuelo "lleva considerablemente más tiempo que el sistema automático".
