LONDRES, 1 May. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Eva Martínez) -
Las primeras horas de la jornada electoral que hoy se celebra en Inglaterra y Gales han transcurrido con normalidad y los líderes de los principales partidos, el laborista Gordon Brown, y el conservador David Cameron, ya han depositado su papeleta en sus respectivos colegios de la capital británica, la pieza más codiciada de esta cita y con un pronóstico abierto ante lo apretado de las encuestas.
Así, aunque están en juego unas 4.000 cartas de concejales en 159 ayuntamientos, la Alcaldía de Londres monopoliza unos comicios en los que el laborista Ken Livingstone podría perder el bastón de mando que ha ostentado desde su creación en el año 2000, ya que los últimos sondeos publicados otorgaban una ventaja de cuatro puntos a su rival, el conservador Boris Johnson, que podría obtener el 43 por ciento de los votos.
Un resultado que supondría un golpe para el responsable del partido en la primera contienda electoral a la que se enfrenta desde que asumió el poder el pasado mes de junio y que se produciría en un momento especialmente delicado, con voces críticas en sus propias filas que cuestionan su liderazgo y conatos de revueltas internas por decisiones adoptadas por el Gobierno como la reforma fiscal o la investigación con células madre.
No obstante, el actual alcalde de Londres confiaba aún ayer en que los ciudadanos finalmente mantengan su apoyo al proyecto que ha encabezado en las dos legislaturas en las que ha estado al frente, en base al "riesgo" que podría suponer un cambio hacia un candidato de quien por el momento se ignora la cualificación para dirigir una ciudad de más de 7 millones de habitantes y un presupuesto anual superior a los 14.000 millones de euros.
El partido se agarra a esta visión como principal argumento para confiar en mantener el sillón en Londres, como declaró el propio Brown en sus declaraciones de aliento a Linvingstone, en las que lo situaba como el único capaz de gestionar los retos principales de la capital británica, entre los que destaca la organización de los Juegos Olímpicos que se celebrarán en 2012.
PARTICIPACIÓN.
Con todo, el destino de la Alcaldía de Londres dependerá en gran parte de la capacidad de los candidatos de movilizar a los 5,5 millones de personas que suma el electorado, en un contexto en el que el último precedente de participación arroja un saldo raquítico de un 37 por ciento. En este sentido, los conservadores cuentan con el potencial de votantes más activos a la hora de acudir a las urnas, puesto que se trata de los segmentos mayores de edad, frente a los jóvenes que tradicionalmente apoyan a los laboristas y que muestran mayor pasividad ante los procesos electorales.
Aún así, el resultado en Londres, que se decidirá a través de un sistema de elección entre una primera opción y una segunda para alcalde, no se conocerá hasta la tarde de mañana, al igual que el de otros ayuntamientos, una vez concluido el recuento que comenzará a partir del cierre de los colegios electorales a las 22.00 horas, hora local (una más en España). Para esta noche se espera el saldo de unos 100 municipios, mientras que los de Gales y algunos de Inglaterra tendrán que esperar hasta mañana como el de la capital.
En total, ingleses y galeses contarán con 15 horas para acercarse a alguna de sus oficinas, abiertas desde las 7.00 horas, en una jornada en la que, según las previsiones meteorológicas, predominarán las lluvias, un factor que según los expertos mina la participación, si bien se producirán algunos claros. No obstante, hasta ahora la jornada transcurre con normalidad y tan sólo 10 colegios en el barrio londinense de Barnet tuvieron problemas al no recibir las papeletas hasta "unos minutos" antes de la apertura, si bien esta situación no impidió que finalmente abriesen a tiempo.
