LONDRES, 7 Dic. (EP/AP) -
La Policía británica admitió hoy que la muerte del ex agente ruso del KGB Alexander Litvinenko, envenenado a principios de noviembre con polonio 210, está siendo investigada como "asesinato", según fuentes de Scotland Yard, mientras fueron encontradas pequeñas cantidades de radiación en la embajada británica en Moscú y un estadio de Londres.
"Los detectives han llegado a la fase en la que es apropiado tratar el caso como un alegato de asesinato", aseguró la Policía Metropolitana británica en un comunicado.
"Es importante subrayar que no hemos llegado a ninguna conclusión sobre los medios empleados, el motivo o la identidad de aquellos que pueden ser responsables de la muerte del señor Litvinenko", dice el comunicado.
Además este miércoles, Mario Scaramella -el experto en seguridad que se reunió con Litvinenko el día que éste enfermó- fue dado de alta de un hospital y se encuentra en buen estado de salud, según confirmó el portavoz del Hospital del Colegio Universitario, Ian Lloyd.
Scaramella ingresó a la clínica después de dar positivo en las pruebas sobre polonio-210, el elemento radiactivo que causó la muerte de Litvinenko el mes pasado.
POLONIO EN EL CAMPO DEL ARSENAL
Las autoridades británicas anunciaron que se había encontrado restos de polonio 210 en el campo del Arsenal, aunque en niveles ínfimos y sin peligro para la población. La radiación fue detectada en dos zonas del Emirates Stadium del club inglés Arsenal, visitado por Andrei Lugovoi, considerado testigo clave en el caso.
El nivel de radiación es "difícilmente detectable" y no constituye un riesgo para la salud de las personas, dijo Katherine Lewis, portavoz de la Agencia para la Protección Sanitaria.
Lugovoi, un ex agente de los servicios secretos rusos que está hospitalizado en Moscú para que le realicen pruebas sobre una posible contaminación radiactiva, presenció el partido entre el CSKA Moscú y el Arsenal el 1 de noviembre, el mismo día que se encontró con Litvinenko.
El ex agente de la KGB, Lugovoi dijo a la radio 'Ekho Moskvy' que conoció a Litvinenko hace una década, en sus tiempos como jefe de seguridad de la cadena de televisión ORT, entonces controlada por el magnate Boris Berezovsky, quien ahora reside en Londres.
RADIACIÓN EN LA EMBAJADA BRITÁNICA EN MOSCÚ
En Moscú, un portavoz de la embajada británica dijo que las pequeñas cantidades de radiación encontradas no representan riesgo alguno para la salud.
"Un equipo de expertos completó un estudio preventivo de la embajada. Determinaron que no hay riesgo para la salud pública. Hallaron pequeños restos de radiación, en cantidades por debajo del nivel que representaría un riesgo para la salud", expresó un portavoz. Añadió que "la embajada funciona normalmente y no hay causa de alarma", sobre la información luego confirmada por la cancillería británica.
Asimismo en Moscú, investigadores rusos dijeron este miércoles que ya habían comenzado los interrogatorios por el caso Litvinenko. Unas de las personas a las que se interrogará es el ex agente ruso Lugovoi, considerado por algunos como clave.
Junto con colegas de Scotland Yard, los investigadores rusos se reunieron este miércoles con un agente de servicios de seguridad metido a empresario que vio a Litvinenko el día que cayó enfermo. La agencia noticiosa Interfax dijo que el abogado Andrei Romashov afirmó que Dmitry Kovtun había testificado el martes y miércoles.
Kovtun era uno de tres empresarios rusos cuyo deseo de negocios y amor por el fútbol los llevó a Londres el primero de noviembre. Kovtun y los otros dicen que se reunieron brevemente con Litvinenko en el bar de un hotel antes de dirigirse a ver un partido entre el CSKA de Moscú y el Arsenal en el Emirates Stadium.
El estadio es el lugar en que el magnate ruso Boris Berezovsky se reunía con amigos y allegados en un palco privado. Litvinenko se unió al círculo de emigrados de Berezovsky luego de huir de Rusia en el 2000.
Lugovoi viajó en tres ocasiones a Londres el mes anterior al deceso de Litvinenko y se reunió con el ex espía cuatro veces, según medios de comunicación rusos.
El funeral de Litvinenko está previsto para el fin de semana.
