AMÁN, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ex dictador iraquí Sadam Hussein cree que Estados Unidos buscará su ayuda para sofocar a la insurgencia en Irak y así facilitar la salida del país de las fuerzas estadounidenses, aseguró hoy domingo el principal abogado del depuesto líder iraquí, Jalil al Dulaimi.
El letrado afirmó que Sadam manifestó que "esos títeres del Gobierno iraquí que los estadounidenses llevaron al poder están indefensos. No pueden protegerse ni al pueblo iraquí".
"Los estadounidenses ciertamente me pedirán ayuda a mí, al liderazgo legítimo de Sadam Hussein y el Partido Baas Iraquí, para rescatarlos de su enorme dilema", aseguró Al Dulaimi a la AP, precisando que esta conversación tuvo lugar el pasado martes.
El abogado iraquí, que dirige la defensa legal del derrocado dictador, consideró que el veredicto en el juicio a Sadam y su anticipada sentencia de muerte podrían ser utilizados como moneda de cambio para lograr la ayuda del ex gobernante a fin de acabar con la insurgencia y permitir la retirada de las fuerzas estadounidenses.
Aunque se abstuvo de precisar lo que su cliente pediría a cambio de la ayuda, Al Dulaimi adelantó que no necesariamente implicaría la reinstalación de Sadam como presidente.
En el encuentro del martes, Al Dulaimi, un suní de 44 años de edad, preguntó al hombre que todavía considera como el presidente legítimo de Irak si estaría dispuesto a ayudar a Estados Unidos. Al Dulaimi dijo que Sadam contestó que lo haría "en aras de salvar a ambos pueblos, los iraquíes y los estadounidenses".
"Lo haríamos en aras de evitar más derramamiento de sangre, por la libertad de todos los iraquíes", añadió Al Dulaimi, cintando a Sadam. El ex presidente predijo que Irak "florecería dentro de cinco años", el tiempo que calculó necesario para la reconstrucción que transformaría al país en la envidia de la región.
Con todo, Sadam cree también que finalmente será condenado a muerte en el juicio al que está sometido desde octubre por el asesinato de 148 chiíes en la localidad de Dujail en la década de 1980. Al Dulaimi expresó su convicción de que Sadam es un factor clave para la vuelta de la estabilidad en Irak y "la única persona que puede detener la resistencia contra las fuerzas estadounidenses".
