Sarkozy convoca una cumbre en 2008 para sentar las bases de la Unión Mediterránea

Actualizado: miércoles, 24 octubre 2007 0:02


PARÍS/TANGER, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, invitó hoy a los jefes de Estado y de Gobierno de los países ribereños del Mediterráneo y a todos los que se sientan afectados por lo que ocurre en esta zona a reunirse en Francia en junio de 2008, cuando París asuma las riendas de la Unión Europea, con el objetivo de fijar las bases políticas, sociales y culturales de la Unión Mediterránea, un proyecto que Sarkozy presentó de manera solemne en Tánger durante la segunda jornada de su visita de Estado a Marruecos.

"En nombre de Francia y en nombre de todos los pueblos del Mediterráneo, cuyos destinos están ligados unos a otros, en nombre de nuestros hijos, que un día nos pedirán cuentas de lo que hemos hecho, invito a todos los jefes de Estado y de Gobierno de los países ribereños del Mediterráneo a reunirse en Francia en junio de 2008 para sentar las bases de una unión política, económica y cultural basada en el principio de estricta igualdad entre las naciones del mismo mar: la Unión Mediterránea", dijo entre aplausos.

El jefe del Estado galo invitó también a todos los que se ven afectados por lo que pasa en el Mediterráneo a participar en la cita como observadores y a contribuir a su éxito. Según explicó, su proyecto de Unión no se hará en contradicción con el Proceso Euromediterráneo --puesto en marcha por la UE en 1995 para fomentar el diálogo entre las dos orillas del Mediterráneo-- ni se construirá "contra África o contra Europa" sino "con Europa y con África".

Sarkozy propondrá pues a la Comisión Europea que se asocie plenamente y participe en todos los trabajos para que la relación sea de asociación y complementariedad y ambos mecanismos se "respalden" y se "refuercen" para forjar progresivamente un "único y mismo destino". Adelantó que, en los próximos meses, consultará con todos los países ribereños los detalles de esta cumbre y que propondrá trabajar sobre una decena de proyectos concretos en torno a los cuales podrá fijarse la futura cooperación.

Este proyecto, dijo, no será "el proyecto de Francia" sino el de todos. "Y no tendrá éxito --agregó-- a menos que todos se comprometan y pongan parte de ellos mismos". "No puede ser más que el fruto de la voluntad común y de la reflexión compartida", insistió Sarkozy.

Recordó cómo se ha hecho la todavía inacabada Unión Europea que en sus inicios fue "un acto de fe que pasó por locura antes de ser una realidad" y destacó que la Unión Mediterránea se hará si existe voluntad para ello. "La Unión Mediterránea se hará si queremos. Francia quiere. Marruecos quiere y sé que, en el fondo, todos los pueblos del Mediterráneo quieren y no se dejarán secuestrar por el odio, la violencia y el rechazo del otro", expuso.

Asimismo dejó claro que si los deseos de unidad anteriores fracasaron fue porque estaban inspirados por "sueños de conquista" y que Francia lo que quiere es llevar adelante un proyecto apoyado en "un sueño de paz , un sueño de libertad, un sueño de justicia, que no se impondrá a nadie porque será querido por todos".

"Nuestro futuro es nuestro. No lo dejemos en manos de nadie. No dejemos que nadie robe nuestros sueños y nuestras esperanzas. Vamos a demostrar a todos los hombres que se puede lograr un gran sueño de civilización y que nuestros hijos estarán orgullosos de lo que hemos hecho juntos", concluyó el jefe del Ejecutivo galo.

Previamente, en Rabat anunció su intención de organizar, también el año que viene, una nueva conferencia euroafricana sobre inmigración similar a la celebrada este año por la Comisión Europea en la capital marroquí, en la que se adoptó un plan para reforzar el control de la inmigración ilegal, fomentar el desarrollo de los países origen de la inmigración y gestionar adecuadamente la inmigración legal. Sarkozy juzgó "esencial" mejorar la gestión de los flujos entre las dos orillas del Mediterráneo.

3.000 MILLONES

Por lo demás, la primera visita de Sarkozy a Marruecos está marcada por el alto contenido económico y ayer el presidente francés firmó acuerdos con el país magrebí por valor de 3.000 millones de euros. Entre otros proyectos figura el de la empresa gala Alstom que será la encargada de fabricar el tren de alta velocidad Tánger-Marrakech, que podría estar en funcionamiento en 2015.

Coincidiendo con la estancia de Sarkozy en Marruecos, un juez francés ha ordenado hoy mismo la detención de cinco funcionarios marroquíes por su supuesta relación con la desaparición del opositor Mehdi Ben Barka, entre ellos el máximo jefe de la Gendarmería Real, el general Hosni Benslimane.

Ben Barka desapareció durante el reinado de Hasán II. Además, el juez Patrick Ramaël, instructor del caso, ha cursado otras cuatro órdenes internacionales: contra el ex jefe de los servicios de contraespionaje, Abdelkader Kadiri; Miloudi Tounsi y dos agentes de los servicios secretos, Boubker Hassuni y Abdlekak Achaachi. Sarkozy se escudó en la independencia del poder judicial para evitar hacer comentarios sobre estos hechos.