MADRID, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
Save the Children ha alertado este miércoles de que la media de niños palestinos muertos en Gaza en los dos últimos días es de uno cada hora, por lo que la ONG, a través de un comunicado, ha pedido a la comunidad internacional una "respuesta inequívoca para detener este derramamiento de sangre".
Dos semanas después de que comenzara la ofensiva militar israelí al menos 70.000 niños gazacíes se han visto obligados a abandonar sus hogares con sus familias, según ha asegurado la ONG que ha cifrado en 116.000 el número de niños que necesita "apoyo psicosocial especializado inmediato" en la Franja.
En Israel también los niños sufren los estragos de la situación "enfrentándose día a día al terror del lanzamiento de cohetes", ha apuntado.
Según el comunicado, el personal de Save the Children y sus socios locales en Gaza están trabajando en las zonas más castigadas por los ataques con el objetivo de proporcionar suministros médicos y ayudar a las familias desplazadas con colchones, materiales de refugio, kits de higiene y materiales para el cuidado de los bebés, aunque han avisado de que "el nivel de necesidad es abrumador".
Los recién nacidos son un sector muy vulnerable pues según asegura la ONG la comida para los bebés es "extremadamente escasa", lo que pone a las madres en una situación de enorme estrés. Además los médicos han alertando de que los partos prematuros se están duplicando.
"Hemos visto muchos partos prematuros como resultado del miedo y de los problemas psicológicos causados por la ofensiva militar", ha explicado el doctor Yousif Al Swaiti director del hospital Al Awda con el que trabaja Save the Children. "El número de casos de partos prematuros se ha duplicado, comparado con los que había antes de la escalada de violencia", ha apuntado el doctor.
PETICIÓN DE ALTO EL FUEGO
"Estamos viendo cómo años de trabajo se vienen abajo con cada explosión", ha asegurado uno de los cooperantes de Save the Children, David Hassell. "Nunca estará justificado que se ataquen escuelas y hospitales cuando tantos civiles no tienen dónde ir. Ninguna de las partes debería usar estas instalaciones para fines militares, condenamos el uso de la fuerza que hemos visto durante los últimos días", ha apuntado el activista.
La ONG ha pedido a la comunidad internacional que "responda a esta guerra contra los niños ejerciendo toda su influencia diplomática para poner fin inmediato al derramamiento de sangre".
"Si la comunidad internacional no actúa ya la guerra contra los niños en Gaza pesará sobre nuestras conciencias para siempre", ha concluido Hassell.
