MADRID, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) ha negado cualquier responsabilidad en el ataque que este viernes ha acabado con la vida del líder de la autoproclamada república de Donetsk, Alexandr Zajarchenko, respondiendo así a las acusaciones de Rusia y los separatistas ucranianos.
"Los servicios especiales ucranianos no tienen nada que ver con esto", ha dicho la portavoz del SBU, Elena Guitlianskaya, según informa la agencia de noticias UNN. En su opinión, el ataque se debe a "las guerras entre los cabecillas" de los insurgentes prorrusos en Donetsk.
La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Maria Zajarova, ha acusado al "régimen de Kiev" de organizar el ataque contra Zajarchenko y ha pedido a la comunidad internacional que ponga en marcha y supervise una "investigación imparcial" para confirmarlo.
En la misma línea, el presidente del parlamento rebelde de Donetsk, Denis Pushilin, ha afirmado que "se trata de una nueva agresión por parte de Ucrania". "Por desgracia, el jefe de la República Popular de Donetsk (...) ha muerto en un ataque terrorista", ha informado la agencia de noticias DAN-News, controlada por los insurgentes prorrusos.
Zajarchenko ha muerto por la explosión de una bomba en la cafetería donde se encontraba, en el centro de Donetsk, a pocos metros de su casa. Otras tres personas han resultado heridas.
De acuerdo con medios afines a los separatistas ucranianos, Zakharchenko ha resultado gravemente herido, por lo que se le ha trasladado a un hospital cercano, donde finalmente ha fallecido.
Las provincias de Donetsk y Lugansk, en el este de Ucrania, viven desde hace cuatro años un conflicto armado que enfrenta a las tropas del Gobierno y a los separatistas prorrusos. A pesar de los acuerdos de paz firmados en 2015 en la capital bielorrusa, la guerra continúa. Más de 10.000 personas han muerto y otras miles se han visto desplazadas.
