Siria/Israel.- Serrat destaca las "condiciones regionales favorables" para la paz en Oriente Próximo

Actualizado: domingo, 15 julio 2007 17:04

"Los sirios en estos momentos están un poco desconcertados" por cómo se ha planteado la oferta de Olmert

DAMASCO, 15 Jul. (De la enviada especial de EUROPA PRESS Ana Pisonero) -

El embajador español en la República Siria, Juan Serrat, reconoció hoy que "estamos ante una oportunidad histórica única" para ver la paz sellada entre Damasco y Tel Aviv por las "condiciones regionales favorables" que, a su juicio, se dan en estos momentos "para la paz bilateral entre Siria e Israel y para una paz regional" e incidió en que "la invitación" cursada por el primer ministro israelí, Ehud Olmert, al presidente sirio, Bachar al Assad, para mantener un diálogo directo "es consecuente con una serie de invitaciones previas de El Assad".

En una entrevista a Europa Press, el embajador incidió en que a diferencia de "algún otro líder regional que habla de borrar del mapa a Israel", El Assad "ha expresado claramente que Siria está dispuesta a sentarse a negociar la paz con Israel, convivir y aceptar a Israel como Estado (...) siempre y cuando Siria recupere el Golán". "El precio de la paz es recuperar el Golán ocupado por Israel", recalcó.

A falta de una "reacción oficial" al "ofrecimiento" de Olmert, el embajador manifestó su creencia de que ésta "vendrá probablemente durante el discurso que el presidente pronunciará el 17 de julio, con ocasión de su toma de posesión como presidente de Siria en su segundo mandato". En el discurso de Estado ante el Consejo del Pueblo (Parlamento), según le admitieron fuentes sirias, "el presidente El Assad expondrá cuál es el camino a seguir".

Hasta ahora, sólo se conocen, incidió, las declaraciones de Mohammad Habache, parlamentario sirio que el pasado miércoles dijo que "no se puede empezar un proceso de paz complicado por la fase final que vendría con el encuentro de los presidentes", por la necesidad de antes mantener otros entre expertos de uno y otro país, a las que seguirían encuentros ministeriales y sólo "cuando hay un principio de acuerdo", precisó Serrat, se reúnen los Jefes de Estado o de Gobierno "ya con una voluntad política muy definida de llegar a un acuerdo".

Por ello, el embajador reconoció que "en estos momentos los sirios están un poco desconcertados por la manera de plantear Israel su oferta, que viene a ser el resultado final", después de que meses atrás Israel asegurara que "lo que tiene que hacer El Assad, como hizo el ex presidente egipcio Sadat, es venir a Jerusalén y hacer su ofrecimiento (de paz) ante la Knesset", algo que en su opinión "probablemente tendría menos aceptación para la opinión pública siria e incluso para la calle árabe" ya que una vez dado el paso "es muy difícil dar marcha atrás" y recordó que "incluso cuando Sadat dio ése paso ya había habido contactos preliminares".

Asimismo, incidió en la importancia para Siria de negociar la paz "con luz y taquígrafos", es decir, "que el Gobierno americano esté involucrado" en las negociaciones de las delegaciones oficiales siria e israelí para "hacer de notario", por ser, dijo, "el que puede valorar, encauzar y apoyar los progresos en alguna dirección". "Pienso que en estos momentos esa es una pata que falta en la mesa, porque no tengo la impresión de que en el encuentro reciente de Olmert con Bush, quedase claro" que, en efecto, Washington desempeñaría dicha función. "Parece que hubo un dejar hacer" por parte de Bush, "sin compromoterse con el resultado de esa negociación".

"Siria negoció con voluntad de llegar a la paz hasta el año 2000" fecha en la que "estaban prácticamente cerrados todos los capítulos de la negociación, salvo algunos temas delicados, fundamentalmente sobre los recursos hídricos del Golán y el control de la frontera junto al lago Tiberíades", explicó el embajador. Sin embargo, "Israel se echó atrás" en el último momento. Tras perder el socialista israelí Ehud Barak los comicios "las condiciones cambiaron sustancialmente" y lamentó que "de haberse llegado llegado al final, habría cambiado radicalmente la situación general en la región".

Serrat admitió no creer personalmente "que solucionar un contencioso dentro de la región" sea una solución, "puede ser un parche, pero la solución debe enmarcarse dentro de lo que el ministro de Asuntos Exteriores Miguel Ángel Moratinos llama el doble recocimiento", matizó, que implica que "Israel reconozca el Estado palestino, una solución de dos Estados conviviendo pacíficamente, y que el mundo árabe reconozca a Israel y conviva pacíficamente dentro de la región". En Oriente Próximo, insistió el embajador, "todos los problemas de alguna manera están interconectados y será muy difícil resolver uno sin abordar los otros".

ORIENTE PRÓXIMO

Por este motivo, destacó la carta remitida recientemente por diez ministros de Exteriores euromediterráneos a Tony Blair como enviado especial del Cuarteto para Oriente Próximo --integrado por la UE, ONU, Estados Unidos y Rusia-- para asumir "un papel dedicido" en la consecución de la paz e invitar tanto a árabes como a israelíes "a poner las medidas necesarias para crear un clima de confianza de cara a una negociación".

"El Cuarteto en estos momentos puede y debe tomar la iniciativa" como "instrumento muy adecuado que puede contribuir a crear un clima de confianza" para impulsar la paz entre israelíes y palestinos ya que, a su juicio, "es muy posible que si el Cuarteto empuja a las partes para progresar en la buena dirección, tanto Israel como Siria estarían dispuestos a iniciar un proceso".

En el plano de las conversaciones sirio-israelíes, el embajador reconoció que "la solución técnica de los problemas de la paz entre Siria e Israel es relativamente fácil" puesto que "está ya prácticamente todo escrito y es una cuestión de voluntad política". "Si los sirios y los israelíes quieren la paz, como han dicho los sirios, en pocos meses se podría firmar un acuerdo, porque los problemas de enjundia no son graves, son problemas de agua y de seguridad menores". En cambio, admitió, que "los problemas de una conferencia regional en la que se aborden todos los temas juntos y especialmente la cuestión palestina --la central de la región por ser la que de alguna manera afecta a todas los demás-- son de solución infinitamente más complejos".

"Los sirios siempre han dicho que estas condiciones que pone Israel de que hay que renunciar a sus contactos con Hamás, Hezbolá... forman parte de un acuerdo final" en el que todas las partes estén implicadas. "No creo que se pueda llegar a un acuerdo en el tema palestino sin contar con Hamás", reconoció Serrat, por su enorme respaldo popular cosechado en las pasadas elecciones de enero de 2005. Además, su poder no parece estar "disminuyendo" y cada vez, dijo, "se impone más la convicción en todos de que hay que hablar con Hamás" porque hacerlo, aseguró el embajador, "es muy positivo para que el resultado sea bueno para todos".

En este sentido, valoró la iniciativa de paz para Oriente Próximo patrocinada por Arabia Saudí en 2002 y reimpulsada este año en Riad como "un buen texto para iniciar un proceso sobre bases sólidas y realistas", puesto que "no sería difícil convencer a todas las partes para tomar dicho texto como base" y subrayó la postura del Gobierno español y de la mayoría de los países europeos, partidarios de preparar una Conferencia, como ya se hizo en Madrid en 1991, en la que todas las partes se sienten a hablar y negociar", y cuya celebración "se está de nuevo explorando".