Soares, Saramago, Mayor Zaragoza, Pujol y Maragall piden que Europa corrija su papel en el mundo

Actualizado: martes, 12 diciembre 2006 23:23

Maragall admite que las dos cumbres euromediterráneas de Barcelona "no han conseguido tender puentes efectivos"

BARCELONA, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente portugués Mario Soares, el escritor José Saramago, el ex director general de la Unesco Federico Mayor Zaragoza y los ex presidentes catalanes Jordi Pujol y Pasqual Maragall coincidieron hoy en alertar sobre la necesidad de que Europa corrija su papel en el mundo.

Así lo dijeron en la sede barcelonesa del Círculo de Lectores, donde presentaron el libro-conversación de Soares y Mayor Zaragoza 'Un diálogo ibérico en el marco europeo y mundial' (Círculo de Lectores-Galaxia Gutenberg).

Pujol afirmó que Europa debe realizar "más esfuerzo" y "renovar su pensamiento político e intelectual", y confió que contribuyan a ello los franceses Ségolène Royal y Nicolas Sarkozy, en quienes ve actitudes "rompedoras" en este sentido.

"A base de decir que los americanos son malos, se nos olvida decir que nosotros somos holgazanes", dijo sobre los propios europeos, y enumeró diversos problemas históricos en los que el continente tiene gran culpa, como el colonialismo.

Soares le dio la razón sobre el diagnóstico de Europa en general y, en particular, sobre el hecho de que "tiene muchas responsabilidades" encima. Además, afirmó que "se puede hacer mucho más" por ella, que "está en una situación realmente difícil".

Saramago destacó que el libro constata dos problemas "centrales": el papel de la ONU y el de Europa. Afirmó que este continente "no tiene voz, no pesa, no cuenta"

En cuanto a la ONU, dijo que debe ser "capaz de intervenir en el mundo, no sólo con cascos azules, sino sobre todo con influencia política real". Y aprovechó para alegrarse de que ya no esté en las Naciones Unidas, como embajador estadounidense, John Bolton, a quien definió como "drácula" que "envenena".

El premio Nobel de literatura destacó otro problema: que las democracias van hoy en camino de ser "autoritarias", un "simulacro" de la democracia "real", y lamentó que "nadie se atreve a decir que se está perdiendo" este tipo de régimen. Se lo reprochó a los medios de comunicación, a los ciudadanos --"que están como dormidos"-- y a los partidos.

Maragall quiso relativizar que Europa sea heterogénea y que no haya conseguido aún una constitución; se mostró esperanzado en que se decida a mirar hacia el sur, y lamentó especialmente que "no hay un Banco del Sur".

Además, admitió que "es cierto que las dos cumbres mediterráneas de Barcelona, en 1995 y en 2005, no han conseguido tender puentes efectivos aún con los países mediterráneos del Este y del Sur". Constató hasta qué punto hay un problema en esta región: "El lugar donde todavía nos matamos los europeos, los americanos --que también vienen para eso, para matar y para morir--, los africanos y los asiáticos".

Mayor Zaragoza afirmó que del propio Mediterráneo y "sobre todo" de Oriente Próximo debe surgir "el primer paso" hacia las soluciones. Añadió que, en los grandes conflictos políticos, "los problemas deben encontrar soluciones inéditas o inventadas", lo que ejemplificó en el trabajo de colaboración contra el apartheid que impulsó Nelson Mandela cuando lideró su país, Sudáfrica, tras salir de la cárcel.