NUEVA YORK, 13 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha pedido a los Tigres de Liberación de la Tierra Tamil (LTTE) que respeten y cumplan la tregua de dos días declarada ayer por el Ejército para permitir la salida de los más de 150.000 civiles que se encuentran atrapados en las zonas de conflicto.
El Ejército ceilandés suspenderá desde hoy, por un periodo de dos días, los combates con el LTTE para permitir la salida de la población civil aislada en la región de Vanni, situada en el norte del país.
En un comunicado emitido ayer por el centro de noticias de Naciones Unidas, Ban ha solicitado al LTTE que adopte medidas "concretas e inmediatas" para proteger a los civiles y "respete la tregua durante toda su duración".
Aunque el alto el fuego decretado por las autoridades de Sri Lanka es inferior al tiempo solicitado por las agencias humanitarias para permitir que la población civil salga de las zonas de conflicto, el secretario general de la ONU calificó el anuncio como "un primer paso útil" y "una oportunidad para avanzar hacia la paz y el fin de los combates".
Además, ha asegurado que Naciones Unidas "hará lo que sea posible para apoyar esta tregua humanitaria y ayudará a poner fin a las graves dificultades a las que se enfrentan los civiles en la zona de conflicto". También distribuirá más ayuda humanitaria a las personas atrapadas por los enfrentamientos.
Los Tigres Tamiles han rechazado hasta la fecha todos los intentos diplomáticos para convencerles de que permitan la marcha de los civiles, los cuales, según los rebeldes, se encuentran en la zona por su propia voluntad. La cruenta guerra civil que se libra en Sri Lanka se ha cobrado la vida de unas 70.000 personas desde 1983.
