NAIROBI, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
Cerca de 300 niños soldados entregaron hoy sus armas y uniformes en el sur de Sudán y volverán con sus familias como parte de los actuales ejercicios de desmovilizaciones promovidas por UNICEF, según informo la agencia de noticias de la ONU, Irin.
"El ejercicio fue un éxito", dijo el portavoz de UNICEF en Sudán, Ben Parker. "La desmovilización de Jorfulus, cerca de ciudad de Malakal, ha sido la más grande de este tipo desde la firma de los acuerdos de paz en 2005 entre el Gobierno sudanés y el SPLM/A (Movimiento/Ejército de Liberación del Pueblo de Sudán)", añadió Parker. Ambas partes acordaron la liberación de los niños soldados que tuvieran reclutados.
UNICEF está aportando material para las escuelas en el sur de Sudán y animando a las comunidades a mandar a sus hijos a la escuela en un intento de reavivar el sistema educativo, que fue destruido durante dos décadas de guerra entre el Gobierno y el SPLM/A. "Es el momento que estos niños vuelvan a casa, vayan al colegio y disfruten de los frutos de la paz", dijo el representante de UNICEF en Sudán, Ted Chaiban.
Tras los acuerdos de paz el SPLM/A es el partido que gobierna ahora en el sur de Sudán. "Estamos determinados a desmovilizar a todos los niños soldados este año", afirmó el director de la Comisión de Desmovilización y Reinserción de Sudan, Benjamin Goro Gimba.
Desde 2001, cerca de 20.000 niños de las antiguas fuerzas rebeldes han sido desarmados, desmovilizados y devueltos a sus familias y comunidades. No obstante, existen todavía unos 2.000 niños vinculados al SPLA/M, sobre todo en áreas remotas.
Los niños que dejaron hoy las armas son en su mayoría de un grupo armado llamado "Mobile", que recientemente unió sus fuerzas con el SPLA. Muchos de sus familiares viven en los pueblos cercanos a Jorfulus.
