ABUJA, 30 Abr. (EP/AP) -
El Gobierno de Sudán confirmó hoy formalmente que está preparado para firmar el borrador de un acuerdo de paz con los rebeldes de la región de Darfur, aunque éstos han manifestado que tienen algunas reservas sobre el tratado.
Ambas partes, que se encontraban reunidas en Nigeria, se enfrentaban hoy a un plazo impuesto por la Unión Africana, después de dos años de negociaciones, con las que pretendía acabar con tres años de enfrentamientos que se han saldado con unos 200.000 muertos y unos dos millones de desplazados.
"El Gobierno desea confirmar su posición de aceptar formalmente este documente y su preparación para firmarlo", declaró el jefe de la delegación de Sudán, Magzoub el Jalif. Los mediadores de la UA distribuyeron el borrador la semana pasada. Sin embargo, un portavoz de los rebeldes dijo que todavía no están satisfechos con el texto. "Tenemos algunas reservas sobre el borrador del acuerdo de paz", afirmó el portavoz de una de las dos facciones rebeldes, el Movimiento Justicia e Igualdad (JEM), Ahmed Husein. "Vamos a presentar nuestras reservas a la mediación después de nuestro encuentro", agregó. Por su parte, la otra facción rebelde de Darfur, el Movimiento para la Liberación de Sudán, ha pedido una extensión del plazo máximo que expiraba hoy.
El presidente de Nigeria, Olusegun Obasanjo, se reunió ayer con los líderes de todas las delegaciones y con los rebeldes, y dijo que presionó a todos los grupos para que firmaran el tratado. "Me reuní con el presidente Obasanjo. Estaba pidiendo a todas las partes que firmaran los documentos", declaró el líder de una facción del JEM.
Desde el miércoles, cuando comenzó a circular un borrador inicial del acuerdo, la propuesta de tratado provocó quejas de los grupos rebeldes de Darfur, que se quejan de ser abandonados por el Gobierno nacional.
El texto pedía al presidente que incluyera a un experto de Darfur, inicialmente designado por los rebeldes, entre sus consejeros. Además, explicando que Darfur, "históricamente necesitada", ha sufrido mucho durante la guerra, instaba al establecimiento de un fondo de rehabilitación, en el que podrían contribuir donantes internacionales, la suspensión de las tarifas escolares a todos los niveles para estudiantes de Darfur durante los próximos cinco años, y la adopción de un plan nacional contra la pobreza.
