Sudán.- Las ONG exigen la detención de los dos dirigentes imputados hace un año por el TPI por crímenes en Darfur

Actualizado: viernes, 25 abril 2008 12:03

LA HAYA, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -

Organizaciones de Derechos Humanos de todo el mundo exigieron hoy la detención del ex ministro de Estado sudanés para Asuntos Internos Ahmad Harun y del líder de los paramilitares 'yanyawid' Ali Kushayb, a dos días de que se cumpla el primer aniversario del mandato de arresto dictado por el Tribunal Penal Internacional (TPI) contra ambos por crímenes de guerra y contra la humanidad en Darfur, en el oeste de Sudán.

Tres años después de que el Consejo de Seguridad de la ONU le remitiera la situación de Darfur, el TPI dictó órdenes de arresto el 27 de abril de 2007 contra Harun y Kushayb por 51 cargos por crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad, concretamente por la violación y el asesinato de población civil en cuatro poblados de Darfur Occidental.

"Hasta la fecha, Sudán no ha actuado en consecuencia debido a su descarado rechazo al TPI y al Consejo de Seguridad", declaró el director del Programa de Justicia Internacional de Human Rights Watch, Richard Dicker.

Las organizaciones, englobadas en la campaña 'Justicia para Darfur', han instado al Consejo de Seguridad de la ONU a que adopte una resolución en la que se exija la plena cooperación de Sudán con el TPI y la detención y posterior entrega al tribunal de Harun y Kushayb.

"Ahora es el momento que el Consejo de Seguridad actúe para garantizar que estos hombres sean arrestados y entregados al TPI sin más demoras, como primer paso para poner fin a la impunidad por los espantosos crímenes cometidos a gran escala en Darfur", afirmó el asesor legal superior del Programa de Justicia Internacional de Amnistía Internacional, Christopher Hall.

"Por medio de la campaña 'Justicia para Darfur', las organizaciones trabajarán en conjunto para generar la mayor presión posible a fin de que la comunidad internacional cumpla con su compromiso de justicia para las víctimas de esos crímenes", afirmó el director ejecutivo del Cairo Institute for Human Rights Studies, Moataz El Fegiery.