NUEVA YORK, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Programa Mundial de Alimentos (PAM) anunció hoy que la falta de recursos para sus operaciones de emergencia en Sudán ha obligado a su personal a reducir inmediatamente las raciones de legumbres secas, azúcar y sal de 3,5 millones de personas.
Aunque las reservas de cereales todavía no se han visto afectadas, la escasez de otros víveres es inminente, advirtió el PAM. "La reducción de las raciones es un último recurso, pero no tenemos alternativa", señaló el director adjunto para Sudán de este organismo de la ONU, Bradley Guerrant.
Explicó que este recorte les permitirá continuar con la distribución de alimentos durante un periodo más largo sin agotar las escasas reservas para los grupos más vulnerables.
Guerrant indicó, por ejemplo, que la intención del PAM es destinar el azúcar a los niños desnutridos y las mujeres embarazadas o que amamantan, puesto que es un elemento vital para su organismo.
Por el momento, el PAM ha recibido apenas un 15% de los 746 millones de dólares que necesita para alimentar durante 2006 a más de seis millones de personas en Sudán. "Urgimos a la comunidad internacional a aportar los recursos requeridos para que podamos seguir ofreciendo ayuda alimentaria a Sudán", agregó Guerrant.
En este sentido, subrayó la importancia de obtener 234 millones de dólares inmediatamente para abastecer los centros de distribución antes de la temporada de lluvias, ya que durante este periodo es muy difícil llegar a las comunidades remotas del país.
