NUEVA YORK, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las mujeres de Sudán del Sur han pedido a los líderes políticos y a las milicias del país que se esfuercen en llevar a buen puerto el revitalizado acuerdo de paz y pongan fin a una "inútil guerra de hombres" que ha arruinado el país, según ha transmitido al agencia de la ONU para la igualdad, ONU Mujeres, al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
El acuerdo alcanzado en septiembre entre el presidente del país, Salva Kiir, y su antigua mano derecha y posterior rival militar, Riek Machar -- que ahora será restaurado como vicepresidente --, es clave para satisfacer "el ansia de progreso" en las mujeres del país, quienes "nunca han tenido problemas entre ellas, ni hostilidades, ni disputas que resolver".
En su lugar, "lo que tenían en común es que se han encontrado atrapadas en una inútil guerra de hombres, donde todas han sido víctimas de violaciones, donde han muerto sus familias y donde su modo de vida ha sido destruido", ha lamentado la directora de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo Ngcuka.
"Nunca han podido hablar con los líderes de su país, los responsables de la crisis, y nos han pedido a nosotros, como Naciones Unidas y la Unión Africana, que hagamos más para ayudarlas y para que los líderes rindan cuentas", ha añadido.
El jefe de las fuerzas de paz para el país africano, Jean Pierre Lacroix, destacó en el mismo evento la "crucial" importancia que supone comenzar el acuerdo de paz con paso firme, porque "proporciona entre otras cosas una hoja de ruta para un acuerdo político integral que ponga fin al conflicto".
"Este periodo de transición será crucial para satisfacer los deseos de las mukeres, porque garantizará además un 35 por ciento de representación femenina en el nuevo Ejecutivo", ha añadido. "Es esencial que sus voces sean atendidas a nivel local para que redunden en justicia y reconciliación", ha aseverado.
Lacroix, que ha visitado el país para evaluar el desarrollo del acuerdo, ha destacado que "las disculpas del presidente Kiir a la gente de Sudán del Sur por el inmenso sufrimiento que han padecido por el conflicto, así como la liberación de los presos políticos, son gestos positivos hacia el fomento de la confianza y la reconciliación".
Sin embargo, ha advertido de que la paz todavía queda muy lejos, y depende de que "las partes se adhieran a un alto el fuego permanente, silencien las armas e incluyan a las mujeres como actrices clave".
