TPIY.- La muerte de Milosevic desata una ola de reacciones de distinto signo en su tierra natal

Actualizado: sábado, 11 marzo 2006 19:33

BELGRADO, 11 Mar. (EP/AP) -

La muerte del ex presidente serbio Slobodan Milosevic en su celda de La Haya ha desatado reacciones contrarias en su tierra natal, Serbia, y a lo largo de toda la región a la que condujo a la guerra hace más de dos años.

Simpatizantes del ex presidente calificaron en Serbia la muerte de su líder de "enorme pérdida" y culparon de la misma al Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPYI), donde Milosevic era juzgado desde el 12 de febrero de 2002 por genocidio y crímenes de guerra perpetrados en Kosovo, Bosnia y Serbia durante la década de 1990.

Sin embargo, en las antiguas repúblicas yugoslavas de Bosnia, Croacia y Kosovo azotadas por el conflicto alimentado por Milosevic, responsables del Gobierno y ciudadanos civiles aseguraron que la muerte del ex presidente trae justicia a las víctimas.

"Al fin tenemos alguna razón para sonreír, Dios es justo", indicó Hajra Catic, presidenta de una asociación de mujeres víctimas de la masacre que en 1995 acabó con la vida de 8.000 musulmanes a manos de tropas serbias en la ciudad bosnia de Srebrenica.

Asimismo, Catic y sus seguidores lamentan que Milosevic haya muerto sin ser declarado culpable y condenado por genocidio y otros crímenes de guerra de los que le acusa el tribunal. "Es una pena que no haya vivido hasta el final del juicio para recibir la sentencia que se mereció", indicó el presidente croata, Stipe Mesic.

Desde Belgrado, simpatizantes de Milosevic guardaron luto y culparon a los responsables del Tribunal de ignorar los síntomas de su enfermedad. "Milosevic no murió en La Haya sino que fue asesinado en La Haya", declaró Ivica Dacic, miembro del Partido Socialista.

"Sin embargo, ha logrado defender los intereses estatales y nacionales de Serbia y del pueblo serbio y todo el mundo debería estarle agradecido por ello".

Por otra parte, el ayudante de Milosevic y líder del Partido Radical Serbio, Tomislav Nikolic, aseveró que la "culpa directa" de la muerte de Milosevic reposa sobre el tribunal del Haya. "Ellos sabían perfectamente que estaba enfermo", indicó Nikolic.

Posteriormente, el partido aseguró en un comunicado que "nada será lo mismo". Por su parte, el presidente de Serbia y Montenegro, Svetozar Marovic, indicó que la muerte de Milosevic representa "un gran cambio moral" para el tribunal de Naciones Unidas. Marovic añadió asimismo que "con su muerte, la historia será privada de la verdad".

Por su parte, el primer ministro, Vojislav Kostunica, que se enfrenta a una fuerte presión internacional que le insta a entregar al TPIY a sospechosos de crímenes de guerra, indicó que su Gobierno pedirá un informe detallado al tribunal sobre la muerte. El presidente serbio, Boris Tadic, expresó asimismo sus condolencias a la familia de Milosevic y al Partido Socialista.

"La muerte de Milosevic me ha conmovido como persona", indicó el ministro de Justicia serbio, Zoran Stojkovic. Asimismo, añadió que la muerte demuestra que los sospechosos que son juzgados en el TPIY no reciben apropiado tratamiento médico.