MADRID, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El filántropo turco Osman Kavala ha sido arrestado por una investigación relacionada con el fallido golpe de Estado de julio de 2016 horas después de que fuera absuelto en el juicio por las protestas en el parque Gezi, han informado fuentes judiciales citadas por la agencia de noticias Anatolia.
Kavala, que fue uno de los nueve acusados que quedaron absueltos el martes de los cargos criminales presentados contra ellos por las protestas del parque Gezi en 2013, ha sido detenido este martes tras haber salido en libertad de la prisión de Silivri, en Estambul.
La Fiscalía turca explicó en un comunicado que ha emitido una nueva orden de arresto contra Kavala por una investigación por su presunta implicación en el intento de golpe de Estado de 2016. La Fiscalía ha señalado que la decisión de detener a Kavala se produce con motivo de una nueva pesquisa.
"Como resultado de otra investigación llevada a cabo por la Fiscalía en relación con la intentona golpista del 15 de julio (de 2016) se ha decidido emitir una orden de arresto contra Kavala por tratar de corromper el orden constitucional", indicó.
Kavala ha sido uno de los nueve acusados absueltos tras ser imputados por participar en las protestas contra el Gobierno en el parque Gezi. En el verano de 2013, las protestas contra la reforma de este parque terminaron derivando en un ola de movilizaciones contra el Gobierno que acabó con ocho manifestantes y un agente de Policía muertos.
El Gobierno turco dijo posteriormente que las protestas fueron orquestadas por miembros de la organización liderada por el clérigo islamista Fethulá Gulen, asentado en Estados Unidos y antiguo aliado del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
Las autoridades de Ankara sostiene que Gulen y su organización orquestaron el fallido golpe de Estado del 15 de julio de 2016, que acabó con la vida de 251 personas y dejó cerca de 2.200 personas heridas.
Gulen mantiene que es inocente y que no tiene ninguna implicación en la asonada castrense. Turquía ha pedido sin éxito a Estados Unidos la extradición de Gulen, residente en suelo estadounidense desde hace décadas.
Kavala ha pasado más de dos años en prisión en Turquía, a pesar de que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos solicitó en diciembre su liberación inmediata por falta de pruebas. Sin embargo, la Justicia turca rechazó dejarlo en libertad por entender que existía riesgo de fuga.
Tanto Kavala como otros dos acusados se enfrentaban a una posible cadena perpetua en caso de haber recibido una sentencia condenatoria, según el periódico 'Hurriyet'. Entre los denunciantes figuraban Erdogan y quienes formaban en 2013 parte de su Gobierno.
