UE/África.- Sócrates responde a los críticos que gracias a la cumbre se habla del drama de Darfur

Actualizado: viernes, 7 diciembre 2007 20:12

LISBOA, 7 Dic. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -

El primer ministro de Portugal y presidente en ejercicio de la Unión Europea (UE), José Sócrates, recordó hoy a todos los que critican la celebración de la II Cumbre Europa-África, que si no fuera por ésta nadie estaría hablando en estos momentos de la violación de los derechos humanos o del drama de Darfur.

En la apertura de la Cumbre Empresarial entre la UE y África, que se celebra en paralelo a la política, el primer ministro defendió que la agenda de esta segunda cumbre es "ambiciosa" y quiere "responder a problemas globales".

Los dos continentes van a adoptar una estrategia conjunta y un plan de acción que "permitirá mejorar la situación de los inmigrantes en Europa, combatir la inmigración ilegal, el tráfico de seres humanos y responder mejor a los dramas humanitarios, como el de Darfur", argumentó el primer ministro luso, que fue el principal impulsor y promotor de esta Cumbre.

En respuesta a las voces que han criticado este encuentro por considerarlo de inútil, el presidente en ejercicio de la UE afirmó que "si no se celebrase esta cumbre, no se hablaría ahora de Darfur, de derechos humanos y de inmigración".

Después indicó que esos críticos cometieron dos errores. El primero "cuando miran para la agenda de la cumbre, que tiene escrito, derechos humanos, paz y seguridad, y alteraciones climáticas, pero no consiguen leerlo. Me gustaría que ese error no perdurase mucho", dijo.

El segundo error, en su opinión, "es que piensan que los temas de la cumbre sólo incumben a algunos grupos en particular, como si el problema de las migraciones solo incumbiese a los inmigrantes, o los del cambio climático a los ambientalistas", señaló.

Antes de concluir su intervención, el primer ministro se dirigió directamente a los empresarios que lo escuchaban y les avisó de que "no puede haber un buen clima para los negocios sin paz y seguridad, sin un ambiente sustentable, sin trabajo estable, sin flujos migratorios regulados y sin buena gobernación y respeto por los derechos humanos", concluyó el político luso.