BRUSELAS, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea anunció hoy el envío de 1,5 millones de euros en ayuda de emergencia a Angola con el fin de contener un brote de cólera que ya ha causado más de 550 muertes durante los dos últimos meses. La epidemia surgió a raíz de las fuertes lluvias que están asolando el sur del continente africano desde el mes de enero, que agravaron la falta de infraestructuras de saneamiento y los bajos estándares de higiene en el país.
Los fondos europeos se canalizarán a través de las organizaciones humanitarias que trabajan en la zona, como Médicos del Mundo y Médicos sin Fronteras, así como de agencias de Naciones Unidas como UNICEF o la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El primer brote de cólera fue detectado el pasado 13 de febrero en los barrios más desfavorecidos de Luanda, donde residen unos 3 millones de personas, la mayoría de ellas desplazadas durante el conflicto armado que sufrió Angola hace unos 20 años. Estos desplazados residen en barrios sin alcantarillado, suministro de agua potable o recogida de basuras.
La intervención combinada de las autoridades angoleñas, las ONG y las aportaciones de las Naciones Unidas consiguieron en una primera fase estabilizar la situación en menos de 100 casos por semana. Pero según destaca la Comisión, a mediados de abril la epidemia ya se había desarrollado con rapidez y se registraban unos 1.500 casos, con una previsión de 2.500 para el 22 de abril.
Otras cinco provincias angoleñas se han visto afectados por el cólera, Benguela, Malanje, Kwanza Norte, Bengo y Huambo. Entre estas poblaciones se han producido desde el 13 de Febrero más de 13.820 casos de contagio y 646 muertes, lo que supone que un cinco por ciento de las personas infectadas fallecen, el porcentaje mortalidad causado por el cólera más elevado del mundo.
El conflicto armado angoleño, que finalizó en abril del 2002 después de 30 años de disturbios, ha dejado al país desprovisto de servicios sociales básicos como los de saneamiento o el suministro de agua potable.
Entre el 25 y 50 por ciento de las personas infectadas por el cólera que no son tratadas fallecen, mientras que un tratamiento adecuado reduce el nivel de mortalidad a un 1 o 2 por ciento. En este sentido la Comisión Europea subraya la urgente necesidad de prevención, de proceder a clorar las reservas de agua del país africano, y gestionar los casos de infección.
