BRUSELAS, 14 May. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea ha avisado este miércoles de que las sanciones siguen sobre la mesa y no dudará en aprobarlas "si es necesario" contra quienes continúen con las hostilidades en Sudán del Sur y ha advertido de que seguirá muy de cerca la aplicación del acuerdo de alto el fuego sellado el pasado viernes por el Gobierno del presidente Salva Kiir y los rebeldes encabezados por el exvicepresidente del país Riek Machar y que debe concretarse en la formación de un Gobierno de unidad nacional.
"Si los líderes no se hubieran reunido y llegado a un acuerdo el viernes sospecho que habríamos actuado muy rápido (con las sanciones). El hecho es que han decidido llegar a este acuerdo y queremos vigilar muy cuidadosamente cómo va su aplicación", ha explicado en rueda de prensa el enviado especial de la UE para el Cuerno de África, Alex Rondos.
"Esto está siendo activamente discutido aquí en la Unión Europea. Las discusiones continúan entre los Estados miembros", ha confirmado Rondos, que ha subrayado la importancia de mantener "una presión constante" sobre ambas partes, incluyendo "la posibilidad de sanciones dirigidas contra individuos".
"Estados Unidos ya ha avanzado en esta dirección", ha recordado, insistiendo en todo caso en la importancia de que los países vecinos cooperen también en las sanciones. "Su cooperación es esencial", ha admitido.
"Esto es un esfuerzo unido para ejercer presión para que las partes entiendan que no pueden continuar con las hostilidades ni atrocidades", ha recalcado.
Rondos no ha querido precisar si la UE estudia sancionar a los tres dirigentes ya sancionados por Estados Unidos o más personas ni se ha comprometido con plazos para tomar una decisión al respecto, aunque fuentes europeas han descartado a priori que se aprueben el próximo lunes en el marco de la reunión de los responsables de Desarrollo de los Veintiocho cuando abordarán la crisis en Sudán del Sur.
"Estamos mirando a personas muy cuidadosamente, no quiero entrar en quién de forma concreta", ha explicado Rondos, que ha precisado que se estudian las sanciones clásicas como la congelación de activos y la restricción de visados a la UE e irían en todo caso contra las personas que "pueden abusar de su autoridad o poder en el país".
"Si es necesario actuaremos", ha recalcado el diplomático europeo, que ha admitido la necesidad de "calibrar" las sanciones "dados los últimos acontecimientos" y "ver cuándo es el mejor momento y cuándo son necesarias".
"Los deberes se han hecho. (...) Nos hemos dotado de más herramientas para identificar quién pueden potencialmente ser un perpetrador" de crímenes o violaciones de Derechos Humanos sobre el terreno, ha precisado.
El diplomático europeo ha subrayado la necesidad de que se despliegue "muy rápido" una misión de supervisión de la ONU sobre el terreno para vigilar el cumplimiento del acuerdo dado que será "el principal elemento de disuasión" para evitar que continúe la violencia. "Ya tenemos una guerra civil", ha admitido, insistiendo en que los esfuerzos se centran en tratar de "limitar cualquier posibilidad para que esto se expanda".
Rondos ha considerado que la misión debería contar con "mucho más de un centenar" de efectivos y desplegarse haya donde haga falta una fuerza de "interposición" de paz y ha precisado que se discute que cuente con una fuerza de protección de "entre tres y cuatro batallones" que aportarían a priori países vecinos como Etiopía y Kenia que se han mostrado dispuestos a contribuir. "Tendrá que durar un mínimo de un año", ha vaticinado, tras precisar que su despliegue total llevaría tres meses desde que la apruebe el Consejo de Seguridad de la ONU.
UE RETIENE 80 MILLONES DE EUROS PARA YUBA
El director general adjunto de Desarrollo del Ejecutivo comunitario, Marcus Cornaro, ha explicado que la UE ha "retenido" un paquete de ayuda al desarrollo de 80 millones de euros al Gobierno de Sudán del Sur "a la espera de que asuman su responsabilidad" sobre el terreno en concepto de "incentivo para la paz" y ha limitado su ayuda a aquella que tiene un impacto "directo" en beneficio de la población.
El Gobierno de Juba debería cumplir para ello condiciones como "concluir seriamente el acuerdo actual" de alto el fuego, "reforzar y hasta cierto punto externalizar la gestión de las finanzas públicas" dado que los ingresos del petróleo están alimentando el conflicto y comprometerse con "la no discriminación étnica en el uso de los fondos públicos", ha precisado. Rondos ha insistido en que es crucial que Yuba distribuya de manera "justa" los ingresos del petróleo.
La Comisión ha destinado 1,1 millones para apoyar las negociaciones de paz y financiación inicial para el mecanismo de supervisión y otros 45 millones de ayuda al desarrollo.
AYUDA PARA HACER FRENTE A CRISIS HUMANITARIA
El director de Operaciones de la Oficina de Ayuda Humanitaria de la Comisión, Jean-Louis De Brouwer, ha recordado que Sudán del Sur vive una crisis humanitaria de nivel 3, el mayor, y que el propio secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, ha avisado del riesgo de hambruna en el país.
La Comisión ha movilizado un total de 85 millones de euros de ayuda humanitaria desde comienzos del año, incluidos 15 millones para ayudar a los refugiados que han huido a los países vecinos, aunque De Brouwer ha anticipado "compromisos suplementarios" en la Conferencia de Donantes que acogerá Oslo el próximo martes. Si se incluye la ayuda humanitaria de los Estados miembros, la ayuda humanitaria europea en total se eleva hasta ahora a cerca de 132 millones en 2014.
Más de un millón de personas se han visto desplazadas de sus hogares dentro del país y cerca de 440.000 han tenido que huir a los países vecinos por el conflicto.
