MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
El eurodiputado socialista y miembro de la Comisión Constitucional del Parlamento Europeo, Enrique Barón Crespo, indicó hoy que la Eurocámara pedirá a la presidencia alemana la convocatoria de una Conferencia Intergubernamental (CIG) con un "mandato claro y restringido" con el fin de solventar la crisis constitucional.
Según Barón, "se ha acabado el periodo de reflexión" tras el 'no' de Francia y Países Bajos al Tratado Constitucional y "ahora hay que pasar a la acción". En este sentido, dijo que el Parlamento Europeo considera que la presidencia alemana "debe convocar una nueva CIG con mandato claro y restringido tomando como base los actuales tratados".
Además, afirmó, "hay que buscar una salida para los países que tienen dificultades e incluir los temas que no han sido tratados en el texto actual o no lo han sido suficientemente". A este respecto, citó cuestiones como el cambio climático, la energía, la inmigración, el diálogo entre civilizaciones o la lucha contra el terrorismo internacional. El Parlamento Europeo, resumió, "es más partidario de utilizar la pluma que la tijera".
El eurodiputado consideró que la labor de la CIG debe terminar "antes de diciembre" y luego, tras tener en cuenta las opiniones de los parlamentos nacionales, el proceso podría estar acabado "para las elecciones a la Eurocámara de 2009 si trabajamos con rapidez". Esta propuesta, que es la que actualmente está debatiendo el Parlamento Europeo, "es factible si hay voluntad política", remachó.
Barón participó hoy en Madrid en una jornada organizada por la Fundación Pablo Iglesias bajo el título 'El rescate sustantivo de la Constitución europea'. En su opinión, el Tratado Constitucional no tiene que ser rescatado "porque no está secuestrado, sino que ha estado congelado". Según él, "el debate está vivo" pero no cabe esperar una solución a la cuestión "el próximo domingo" durante el Consejo Europeo de Berlín con motivo del 50 aniversario del Tratado de Roma.
En cuanto a la importancia que para el futuro de la Constitución tienen las elecciones presidenciales francesas, Barón afirmó que "lo primero que tienen que hacer los franceses es aclararse sobre su crisis de régimen" pero en todo caso, añadió, "no queremos castigar a los franceses" por su 'no', como "tampoco lo hicimos con Dinamarca cuando rechazó Maastricht o con Irlanda cuando rechazó Niza".
"CRISIS DE LOS 50"
Por su parte, la también eurodiputada socialista y secretaria de Relaciones Internacionales del PSOE, Elena Valenciano, resaltó el "balance positivo" de los 50 años de Unión Europea e incidió en que actualmente estamos "analizando la historia de un éxito en un momento de crisis". La UE, dijo, parece estar atravesando la "crisis de los 50 y es posible que no se salga bien de ella, todo depende de cómo se gestione".
No obstante, hizo hincapié en que es posible que la crisis no sea de la UE "sino de las naciones que la componen" o incluso de "las relaciones entre los ciudadanos y las instituciones europeas y nacionales". Según la eurodiputada, "la construcción europea ha sido más bien elitista" y ahora, con la Constitución, "se ha pasado a preguntar todo a los ciudadanos" sin haberles explicado antes qué es la UE.
En su opinión, este es quizá "un salto demasiado grande" máxime cuando en algunos países europeos "existe un divorcio entre los ciudadanos y las instituciones", lo que explica, añadió, en gran medida lo ocurrido en Francia con el referéndum sobre la Constitución. En este sentido, consideró que "los gobiernos nacionales tienen gran responsabilidad en que las cosas sean como son".
Para Valenciano, "los políticos actuales ven la realidad en clave electoral y a corto plazo" por lo que "el proyecto europeo está en gran parte ausente" de sus mensajes. Por otra parte, lamentó que "los gobiernos nacionales responsabilicen a Bruselas de los problemas y luego se atribuyan los éxitos de Bruselas como propios". "Ya no es tiempo de seguir diseñando Europa de espaldas a los ciudadanos", concluyó.
Además, la eurodiputada se mostró "preocupada por la deriva" que ha tomado el Gobierno polaco y advirtió de que los tratados contemplan la posibilidad de "sanciones contra los países que no actúen de acuerdo con las normas europeas". "Si Polonia está dentro está para cumplir las reglas de las que se ha dotado la UE", agregó.
