BRUSELAS, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea aprobó hoy la obligatoriedad de un etiquetado único para los explosivos en el conjunto de la Unión Europea. Esta medida pretende mejorar el control del uso civil de explosivos, especialmente en el sector minero, e incluye normas más estrictas para los fabricantes, intermediarios y usuarios en la elaboración de los informes y la gestión de las existencias.
La marca de identificación única permitirá reducir el plazo de hasta dos días que se tarda actualmente en determinar el origen de un explosivo y facilitar la averiguación de si procede o no de un robo. La diferencia de etiquetados que existe en los países de la Unión supone una dificultad añadida para las autoridades nacionales a la hora de identificar el explosivo y discernir si es legal o no su posesión.
El comisario de Industria y Empresa y vicepresidente del Ejecutivo comunitario, Günter Verheugen, declaró, a través de un comunicado, que aunque "no se pone en duda el uso de explosivos para diversas actividades económicas", la posibilidad de que sea "desviado o mal empleado" debe "contenerse" para mejorar la seguridad de los ciudadanos.
El nuevo etiquetado adoptado este viernes en Bruselas deberá incluir datos sobre el país productor o importador, el fabricante y lugar de producción y un código único. Afecta a los diferentes tipos de explosivos, ya sea en cartuchos, binarios, detonadores eléctricos o no eléctricos, electrónicos o no electrónicos, mechas lentas, etc.
Además, por este reglamento, las empresas especializadas en explosivos deberán conservar sus informes durante un periodo de diez años a partir de la entrega de los explosivos o de la última fecha conocida tras su utilización. De este modo, el explosivo dejará un rastro que permitirá identificar en todo momento al poseedor del mismo.
