BRUSELAS, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea reclamó hoy el "cese inmediato de las hostilidades" en Líbano como paso previo a la negociación de un "alto el fuego duradero" entre las partes en las conclusiones de una reunión extraordinaria de ministros de Asuntos Exteriores que mantiene muchas similitudes a la propuesta de resolución presentada por Francia en el Consejo de Seguridad de la ONU y que confían en que prospere para dar salida a la crisis actual.
"El Consejo reclama un cese inmediato de las hostilidades que se seguirá de un alto el fuego duradero", indicó el texto de conclusiones que también señaló que "el Consejo de Seguridad tendrá que convenir rápidamente un marco político para una solución duradera acordada por todas las partes, que es precondición necesaria para el despliegue de una fuerza internacional".
Ésta es el orden de sucesión de los acontecimientos --cese de hostilidades, alto el fuego y fuerza internacional-- que fijaron los ministros de la UE como los pasos para seguir en la resolución de un conflicto. Un eventual contingente militar, indicaron, "requiere un fuerte mandato de la ONU para actuar en apoyo de una solución política y de las fuerzas armadas libanesas". "Una vez que el marco haya sido establecido, los Estados miembros de la UE han indicado su disposición a contribuir en esa operación junto a actores internacionales", añade el texto.
Esta solución fue dada por buena por distintos dirigentes comunitarios al término del Consejo, a pesar de que, previamente a la versión final para pedir el "cese inmediato de las hostilidades", la Presidencia finlandesa de la UE presentó a los ministros un texto en el que se instaba al "alto el fuego inmediato", propuesta con la que no estuvieron de acuerdo varios, entre ellos Reino Unido y Alemania, indicaron fuentes diplomáticas.
Sin embargo, en la rueda de prensa final el ministro de Exteriores de Finlandia y presidencia del Consejo, Erkki Toumioja, dijo que "puedo aseverar que no existen fracciones ni divisiones en la UE, ni fisuras" e insistió en que "la frase clave es que el Consejo exige una interrupción inmediata de las hostilidades que debe verse seguida por un alto el fuego sostenible".
DEJAR DE GUERREAR
Por su parte, el Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Javier Solana, aclaró que la diferencia entre "cese inmediato de las hostilidades" y "alto el fuego" "está muy clara": "cesar las hostilidades quiere decir dejar de guerrear entre las dos partes, y durante ese plazo de tiempo hay que proceder a todas las negociaciones necesarias para un alto el fuego sostenible".
En cualquier caso, el resultado final de las discusiones fue interpretado por Francia y por el Consejo en general como un respaldo a la propuesta de resolución que París presentó ayer para la aprobación del Consejo de Seguridad, algo que los europeos esperan que sea cuanto antes mejor.
Es más, la UE considera que actualmente son miembros del Consejo de Seguridad --entre permanentes y no permanentes-- cinco países europeos, por lo que confía en que la resolución francesa tenga posibilidades de aprobarse.
En rueda de prensa, el ministro francés de Exteriores, Philippe Douste-Blazy, destacó que el texto aprobado hoy tiene "una gran convergencia" con el que presentó París en Nueva York y, al igual que hicieron Toumioja, Solana y el ministro Miguel Ángel Moratinos, defendió la necesidad de que primero exista una ausencia de violencia para empezar a negociar el alto el fuego definitivo.
Douste-Blazy se mostró "satisfecho de ver que tenemos una política exterior en la UE" que "hable con una sola voz" y aseguró que "la UE quiere ayudar a la resolución francesa en el Consejo de Seguridad".
Asimismo, el ministro francés aseguró que está "deseando trabajar" con Estados Unidos "en la consecución de una paz duradera entre Israel y Líbano" y "deseo que en los próximos días se pueda tener un acuerdo" con respecto a la resolución, sobre la que Washigton tendría derecho de veto como miembro permanente del Consejo de Seguridad.
CONDENA A ISRAEL Y HEZBOLÁ
Los ministros expresaron además su "extrema preocupación por las victimas civiles libanesas y civiles y el sufrimiento humano", así como por la "destrucción de infraestructura civil y el incremento del número de desplazados internos seguida de la escalada de violencia".
Asimismo, el texto de conclusiones incluye sendas condenas a las acciones de una y otra parte. Por un lado, "condena la muerte de civiles inocentes, mayoritariamente mujeres y niños, y un ataque aéreo israelí en la ciudad libanesa de Qana" y dejó claro que "todo ataque contra el personal de la ONU es inaceptable y deplora la trágica muerte de cuatro observadores militares de la ONU". Por otra parte, los ministros "condenaron los ataques con cohetes de Hezbolá sobre Israel".
Insistieron también en que "cualquier solución debe incluir el retorno de los soldados secuestrados y prisioneros y un acuerdo sobre las fronteras internacionales de Líbano y el despliegue de las fuerzas armadas libanesas por todo el territorio apoyado por una fuerza internacional y el cumplimiento del acuerdo de Taif y la resoluciones del Consejo General 1559 y 1680".
TERRITORIOS PALESTINOS
Por otra parte, el texto de conclusiones llama particularmente la atención sobre la situación en los territorios palestinos, donde el conflicto no se ha detenido con la crisis del Líbano.
"El Consejo deplora la continuación de la violencia en Gaza y en Cisjordania", indicó un texto en el que la UE "reitera su llamado a todas las partes para que vuelvan al proceso de paz en base a la Hoja de Ruta" y se comprometió a "promover un plan comprensivo para Oriente Próximo" en cooperación "otros socios y países de la región".
