La comisaria europea se muestra partidaria de dar "tiempo" a Irlanda para que ofrezca una salida tras el 'no' al Tratado de Lisboa
MADRID, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -
La comisaria europea de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, defendió hoy la nueva Directiva de Retorno aprobada por la Unión Europea porque hace que la situación de los inmigrantes "sea mejor" y supone el "primer pilar" de la futura política europea de inmigración, si bien reconoció que no se ha informado bien sobre su contenido, lo que ha generado las críticas.
Los inmigrantes "¿están mejor o peor que antes de este pacto?", se preguntó la comisaria, para responder acto seguido: "están claramente mejor", sobre todo porque, dijo, "hay una armonización de las reglas". Además, subrayó, la nueva directiva supone "el elemento clave en la construcción de la política de inmigración común". Este texto, incidió, "es el primer pilar de la política de inmigración que queremos lograr", si bien recordó que en esta materia la UE "no tiene toda la competencia".
Ferrero-Waldner admitió que el contenido de la directiva "no se ha comunicado bien", pero justificó este hecho en que la Comisión Europea sólo puede informar y explicar los acuerdos y documentos aprobados, porque puede haber cambios de última hora. La aprobación de la directiva, que contempla un plazo máximo de 16 meses para la repatriación de ilegales a sus países de origen, ha suscitado las críticas de muchos países, sobre todos los latinoamericanos.
UNIÓN POR EL MEDITERRANEO
Por otra parte, en su intervención en el Foro de la Nueva Economía, calificó de "éxito" la cumbre en París de la Unión por el Mediterráneo (UPM) e insistió en que ésta "se basa en el Proceso de Barcelona" y por tanto, "no significa que lo hayamos olvidado". Sin embargo, consideró "importante" el hecho de que esta nueva iniciativa contará con una "copresidencia norte-sur" y además estará financiada "no sólo con dinero europeo sino también con fondos privados".
Para la comisaria, el hecho de que "toda Europa estuviera allí" supone un éxito porque "al principio había una propuesta que habría sido muy difícil de ser aceptada por todos", en referencia a la propuesta inicial del presidente francés, Nicolas Sarkozy, de que la UPM reuniera sólo a los países de las dos orillas del Mediterráneo.
En este sentido, restó importancia al hecho de que no todos los dirigentes de los países del sur estuvieran en París, recordando que también en la primera cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del Proceso de Barcelona tampoco estuvieron todos. La razón estriba en parte, en su opinión, en que no se han resuelto los conflictos israelo-palestino y del Sáhara. "Desgraciadamente pusieron su sombra al Proceso de Barcelona y también la pondrán al de París", lamentó.
En cuanto a la futura sede de la Secretaría General de la UPM, Ferrero-Waldner consideró que Barcelona "naturalmente es una buena candidata", pero recordó que otros países como Marruecos, Túnez o Malta, o la ciudad francesa de Marsella también han presentado su candidatura.
Por otro lado, dijo que la Comisión Europea trabaja en la elaboración de una "propuesta política" para una colaboración más estrecha entre la UE y el Magreb que se presentará "en septiembre u octubre". Dentro de esta mayor cooperación que se espera fomentar, "sabemos que tenemos que contribuir a la resolución difícil del conflicto del Sáhara" y también "tenemos que trabajar con cada uno de los Estados" por separado.
TRATADO DE LISBOA
La comisaria de Relaciones Exteriores se mostró partidaria de "dejar reflexionar a Irlanda durante el verano" sobre el 'no' que los irlandeses han dado al Tratado de Lisboa, "y que ellos mismos nos digan en octubre qué hacer". Respecto a la opinión expresada por Sarkozy de que tendrán que volver a votar de nuevo, Ferrero-Waldner insistió en que "son los irlandeses los que tienen que decidir". "Démosles un poquitín de tiempo", agregó.
Ferrero-Waldner se mostró convencida de que la UE "seguirá adelante, aunque con un pequeño retraso". En este sentido, advirtió de que "el mundo no dejará de girar mientras Europa se sigue mirando al ombligo de su reforma institucional por mucho que ésta sea apasionante".
Para la comisaria, en la era de la globalización, "es necesaria en la escena mundial una Europa fuerte y efectiva que defienda los intereses de los ciudadanos". Para lograr una "Europa global", prosiguió en su reflexión, "hace falta voluntad política" para que la Unión Europea deje de ser un "poder suave".
CUBA, KOSOVO Y TURQUIA
En otro orden de cosas, la ex ministra de Exteriores austríaca dijo que ella había sido una de las defensoras de que se levantaran las sanciones a Cuba por parte de la UE, porque "estas sanciones no han servido". Ahora, añadió, "esperamos que los progresos iniciales que se han hecho (en la isla) sigan adelante". Además, indicó que en el encuentro que mantuvo con el canciller cubano, Felipe Pérez Roque, en la cumbre de Lima le pidió "seguir adelante y liberar a más presos políticos".
En cuanto a Kosovo, Ferrero-Waldner insistió en que es "un caso muy particular y no es un precedente" y afirmó que para que hubiera estabilidad en la región "había que dar este paso" de apoyar la independencia de la antigua provincia serbia.
Por último, preguntada por la adhesión de Turquía, la comisaria dijo que este país "tiene todavía mucho que hacer" puesto que para "entrar en un club hay que cumplir las reglas" que en el caso de la UE "son claras y duras". El proceso de adhesión de Turquía, añadió, "es un proceso paso por paso, depende mucho de Turquía pero también de una decisión unánime de todos los Estados miembros".
