UE.- Frattini ve imprescindible crear un registro de pasajeros aéreos porque el terrorismo "es la amenaza número uno"

Actualizado: viernes, 25 enero 2008 11:08

BRDO (ESLOVENIA), 25 Ene. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Justicia, Libertad y Seguridad, Franco Frattini, consideró hoy "absolutamente necesario" crear un registro comunitario de datos de pasajeros aéreos que entren y salgan de la UE similar al que ya existe en Estados Unidos desde los atentados del 11-S porque a su juicio el terrorismo "es la amenaza número uno" para la sociedad europea.

"Hasta ahora nos hemos ocupado de la seguridad de los americanos, y ahora ha llegado el momento de ocuparse de la seguridad de los europeos. El terrorismo sigue siendo la amenaza número uno", dijo Frattini a la entrada de la reunión informal de ministros del Interior de la UE que tiene la creación de este registro de pasajeros aéreos como principal punto del orden del día.

El vicepresidente del Ejecutivo comunitario aseguró que no existen "resistencias" entre los Estados miembros a poner en marcha este sistema y abogó por mantener una "estrecha cooperación" entre los Veintisiete y la Eurocámara para "aprobarlo lo antes posible". En este sentido, Frattini destacó que se ha invitado a la reunión informal al presidente de la comisión de Libertades Públicas del Parlamento, el liberal belga Gérard Deprez, con el objetivo de que "esté estrechamente implicado en las discusiones".

Los ministros del Interior de los Veintisiete ya expresaron su respaldo a la creación del registro de pasajeros aéreos en la reunión informal que celebraron el pasado octubre en Lisboa, aunque no entraron a discutir los detalles de la propuesta de la Comisión.

Según los planes de Bruselas, las compañías aéreas estarían obligadas a entregar un total de 19 datos que se conservarán hasta un máximo de 13 años para realizar análisis de riesgos y poder identificar a sospechosos de atentados terroristas. El registro tendrá un carácter descentralizado. Las aerolíneas suministrarán la información a la autoridad nacional competente a la que designe cada Estado miembro. Después, los países tendrán que compartir datos y los análisis de riesgo que se hagan a partir de ellos.

Sólo estarán cubiertos los vuelos entre la UE y un país tercero y a la inversa, y no los intracomunitarios. Entre los datos que tendrán que entregar las compañías aéreas se encuentran el nombre, número de teléfono y dirección de correo electrónico, número de tarjeta de crédito o itinerario del pasajero. No se guardarán datos sensibles como la religión, la raza o las preferencias alimentarias.