UE.- López Garrido dice que en la UE hay "unanimidad" sobre la necesidad de una "reforma institucional"

BERLÍN, 24 Mar. (del enviado especial de EUROPA PRESS, Juan Sanhermelando) -

El portavoz del grupo parlamentario socialista, Diego López Garrido, aseguró hoy que en la Unión Europea hay "unanimidad" sobre la necesidad de una "reforma institucional" cuyo contenido será "muy parecido" al proyecto de Constitución Europea. A su juicio, la razón por la que esto no se dice explícitamente en la Declaración de Berlín que adoptarán este domingo los líderes europeos es por "respeto" al desarrollo de las elecciones presidenciales francesas.

"Yo creo que hay unanimidad, se diga o no se diga explícitamente en un texto, en que Europa necesita una reforma institucional. Eso es una cosa muy obvia", dijo López Garrido antes de participar en la reunión del Partido Socialista Europeo que se celebra en Berlín con motivo de las conmemoraciones del 50 aniversario de la firma del Tratado de Roma.

Subrayó que los 27 jefes de Estado y de Gobierno firmaron en su momento el texto del Tratado constitucional, rechazado posteriormente en los referendos de Francia y Países Bajos, y que "ya casi veinte países lo hemos ratificado". A su juicio, tras las presidenciales francesas, Alemania podrá fijar una "hoja de ruta" para salir del atasco y la presidencia portuguesa en el segundo semestre de 2007 "llevará a cabo este objetivo".

"Yo estoy convencido de que vamos a ir a una reforma institucional y a algo muy parecido a lo que es ahora mismo el proyecto de Constitución. No hay otra salida", apuntó el portavoz del grupo parlamentario socialistas, recordando que los ciudadanos en las encuestas reclaman "una Europa mucho más unida" con una "voz única" en política exterior y de defensa y "que pueda abordar los grandes desafíos del siglo XXI".

López Garrido aseguró no ver ningún "problema" en el hecho de que la declaración de Berlín no sea firmada por todos los líderes europeos sino únicamente por los presidentes de las tres instituciones comunitarias. "Todos van a estar allí, todos se sienten representados, nadie dirá nada en contra de esa declaración, y por tanto hay que suponer que están de acuerdo con lo que se diga", recalcó.

En su opinión, no puede decirse que la Declaración de Berlín se quede corta porque supone "una reafirmación de los valores de Europa" y un recordatorio de los desafíos a los que los Estados miembros sólo podrán enfrentarse en el futuro unidos y no en solitario, como la resolución de los grandes conflictos internacionales, el cambio climático, el terrorismo internacional, la regulación de la inmigración o la lucha contra el crimen internacional.

"Todos estos temas sólo pueden abordarse desde Europa. Yo creo que esto lo han entendido los países que la componen y este 50 aniversario es una reafirmación de eso, de que Europa tiene que ser nuestro futuro y que sólo se podrá hacer con los ciudadanos. Por eso los socialistas hablamos de una nueva Europa social, no entendemos que sea posible una Europa sin los ciudadanos y sin que los ciudadanos noten que Europa aporta mucho a su bienestar", dijo.

ESPAÑA, LÍDER EN LA UE

López Garrido consideró que la UE ha conseguido los grandes objetivos con los que se fundó hace medio siglo, los de "estabilidad, democracia y respeto de los Derechos Humanos". Recordó que España no pudo estar los 30 primeros años por la dictadura franquista pero desde su entrada ha aprovechado "muy bien" el tiempo y ahora ejerce un papel de liderazgo.

"Estamos a la cabeza del desarrollo económico y social en Europa, con la creación de casi la mitad de los empleos que se crean en Europa y estamos a la cabeza del crecimiento. España en estos momentos lidera junto con otros países la construcción europea a pesar de que hemos llegado 30 años tarde", dijo. A su juicio, los ciudadanos españoles son conscientes de esta situación y por ello aprobaron la Constitución en referéndum.

Por su parte, el eurodiputado socialista Carlos Carnero, que también asistió a la cumbre del PSE, aseguró que ha echado en falta "transparencia" en la elaboración de la Declaración de Berlín y una mayor participación de la Eurocámara. "Lo firmamos porque es una declaración que está bien, sin ser la séptima maravilla del mundo, y porque queremos contribuir al buen ambiente que está creando la presidencia alemana", dijo, aunque pidió un cambio de método de trabajo a partir de ahora para resucitar la Constitución.

"El método para esta Declaración no puede ser el método para después de junio. si queremos solucionar el problema constitucional hay que hacerlo con la misma medicina que se hizo la constitución, transparencia y participación. De puertas para dentro ganan los que quieren menos Europa y pierden los que quieren más", concluyó.