MADRID, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado para la UE, Iñigo Méndez de Vigo, ha aclarado que él nunca habló de que España, Francia e Italia hubieran suscrito este martes una declaración conjunta pidiendo que los acuerdos del último Consejo Europeo para combatir la crisis de deuda se apliquen "inmediatamente", sino que se limitó a reflejar en un comunicado que ésta era una reflexión compartida.
En declaraciones a Europa Press, Méndez de Vigo ha salido al paso de la polémica generada por la difusión esta tarde de un comunicado del Ministerio español de Asuntos Exteriores y de Cooperación que aseguraba que el secretario de Estado para la UE y sus colegas francés e italiano, Bernard Cazeneuve y Moavero Milanesi, habían pedido la "inmediata ejecución" de esos acuerdos en el Consejo de Asuntos Generales celebrado hoy en Bruselas.
Francia e Italia se desmarcaron posteriormente de ese comunicado. El representante francés, Bernard Cazeneuve, ha llegado a decir que su contenido "no se basa en ninguna realidad". Esta tarde, Cazeneuve ha hablado por teléfono con Méndez de Vigo, que asegura que el malentendido ha quedado superado.
Méndez de Vigo, que ha reconocido la autoría del comunicado, ha explicado que su difusión respondía tan sólo a una voluntad de trasladar a la opinión pública la "reflexión general" que él había hecho durante la reunión y que fue compartida por varios de sus colegas, entre ellos el francés y el italiano.
"La gente se pregunta qué ha pasado con los acuerdos adoptados en el último Consejo Europeo", ha señalado Méndez de Vigo que, aprovechando que uno de los puntos del día de la reunión de hoy con sus colegas europeos tenía que ver con el seguimiento de esos acuerdos ha intervenido durante "unos tres minutos".
Su intervención perseguía argumentar que "si la justicia, además de ser justa, tiene que ser rápida" lo mismo ocurría con las medidas que aprueban los líderes europeos en sus cumbres. También quería subrayar la necesidad de que los acuerdos del Consejo Europeo deben aplicarse rápidamente después de que se anuncien, porque si no se generan falsas expectativas.
Según Méndez de Vigo, tanto el representante francés como el italiano, entre otros, compartieron esta "reflexión general". Aunque el secretario de Estado para la UE habló con carácter general, a España le interesa que se ponga en marcha cuanto antes un supervisor único de la banca a partir del Banco Central Europeo (BCE), condición necesaria para que la ayuda de hasta 100.000 millones de euros para sanear el sistema financiero español deje de computar como deuda pública.
Los líderes europeos se comprometieron a que esta iniciativa esté lista a finales de 2012, pero posteriormente Alemania y otros países han dicho que tardará al menos hasta mediados o finales de 2013.
A España también le interesa que se ponga en marcha cuanto antes el plan de crecimiento aprobado por los líderes europeos por valor de 120.000 millones de euros, si bien Méndez de Vigo insiste en que no se refirió en concreto a ninguno de estos dos temas, sino que solo hizo una "reflexión general" sobre la necesidad de no permitir que la burocracia retrase la puesta en marcha de esas decisiones.
A Méndez de Vigo le pareció "una noticia positiva" que se hubiera producido un "alto grado de consenso" en la discusión de hoy en torno a la reflexión que él había introducido, y por eso decidió plasmarlo en un comunicado que no quiso presentar como una declaración conjunta, aunque se haya interpretado así.
