BRUSELAS, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Europea de Sindicatos (CES) expresó hoy su "pleno apoyo" a la iniciativa adoptada por seis Estados miembros, entre ellos España, de lanzar un pacto europeo para la igualdad de hombres y mujeres. Coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer trabajadora, la CES pide a sus afiliados presionar a los gobiernos para que apoyen la iniciativa y den señales claras de que están dispuestos a asumir sus responsabilidades para permitir a las mujeres desarrollar todo su potencial.
Francia, España, Dinamarca, Suecia, Finlandia y la República Checa dirigieron el pasado 9 de febrero una carta a la presidencia austriaca de la Unión Europea y al presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, en la que proponen un pacto para aumentar la participación de las mujeres en el mercado laboral y promover la igualdad entre los hombres y las mujeres.
Dicho pacto, que los firmantes quieren que se debata durante la cumbre europea de los próximos 23 y 24 de marzo, se apoyaría en objetivos, fines e instrumentos ya definidos por el proceso de Lisboa, las líneas directrices integradas para el crecimiento y empleo, así como la Hoja de ruta para la futura política de igualdad entre mujeres y hombres.
Un reciente informe presentado por la Comisión Europea revela que las mujeres cobran menos que los hombres, ocupan menos puestos políticos y están mal representadas en los cargos directivos de las empresas y que las mujeres siguen perdiendo respecto a los hombres, sobre todo cuando se trata de sueldos.
"Las mujeres europeas siguen perdiendo respecto a los hombres, sobre todo en lo que se refiere a sueldos. Por hora trabajada, las mujeres ganan un 15% menos y parece que estamos lejos de acabar con esta diferencia salarial", se lamenta Viviane Goergen, presidenta del comité de mujeres de la CES.
"Además, dado que tienen empleos de peor calidad y dificultades para conciliar la vida profesional y familiar, las mujeres tienen que elegir entre mantener esa diferencia salarial o tener menos hijos, y ninguna de las dos opciones es buena para el futuro de Europa", prosigue Goergen.
Aunque la estrategia europea de crecimiento y empleo reconoce que la igualdad de género es esencial, los programas nacionales de reforma no dan visibilidad a las cuestiones de género, y esto es inaceptable", se queja, por su parte, CatelenePasschier, secretaria confederal de la CES. "Si queremos alcanzar los objetivos de Lisboa y garantizar el desarrollo de todo el potencial de las mujeres se debe tomar en serio la igualdad entre sexos y suprimirse las barreras", añade.
Para ello propone, abordar cuestiones como la conciliación de la vida familiar y laboral, la reducción de las largas jornadas de trabajo, la lucha contra la segmentación horizontal y vertical o la desigualdad salarial. "Los agentes sociales se han comprometido en este terreno, pero lamentablemente parece que no todos los Estados miembros han seguido la misma vía", agrega.
