Se felicita por la bajada del euro frente al dólar porque favorecerá las exportaciones
NIZA, 13 Sep. (Del enviado especial de EUROPA PRESS, Juan Sanhermelando) -
El vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, respaldó hoy la decisión de la UE de no poner en marcha un plan de estímulo fiscal equiparable al de Estados Unidos para hacer frente a la crisis. A su juicio, una medida de este tipo aumentaría el déficit y la deuda de los Estados miembros y se traduciría en una subida de los tipos de interés a largo plazo, lo que resultaría "muy negativo en términos de crecimiento".
Solbes dijo que la diferencia entre Estados Unidos y la UE es que la economía americana tiene una "gran flexibilidad para entrar en situaciones de déficit y volver a una situación de superávit", mientras que la europea se caracteriza por su "lentitud" para volver a un saldo positivo una vez que ha entrado en números rojos.
"Si esa es la percepción del mercado, una desviación excesiva en términos fiscales en Europa (...) es una apuesta por tipos de interés altos a largo plazo, lo que lógicamente es muy negativo en términos de crecimiento", señaló el vicepresidente al término de la reunión informal de ministros de Economía de la UE.
En este sentido, Solbes respaldó la decisión de los Veintisiete de ceñirse a los límites marcados por el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que permite un déficit máximo de hasta el 3% y de proseguir con las reformas estructurales para aumentar la competitividad. También expresó su apoyo a que el Banco Europeo de Inversiones (BEI) movilice 30.000 millones de euros en los próximos 3 años para ayudar a las pequeñas y medianas empresas a lograr financiación, y recordó que en España el Instituto de Crédito Oficial (ICO) tiene un programa similar.
"No es que no haya nada que cambiar. Hay que apretar el acelerador en los distintos instrumentos que tenemos", dijo Solbes.
MÁS EXPORTACIONES
Al igual que sus colegas, el vicepresidente expresó su satisfacción por la bajada del euro frente al dólar de las últimas semanas y destacó que, pese a su efecto negativo sobre los precios, esta evolución tendrá "un impacto claramente positivo en términos de exportación".
"Europa necesita corregir parte de sus desequilibrios vendiéndonos fuera, y no tanto en EEUU, sino en el contexto internacional y básicamente con países de otras áreas distintas de EEUU", concluyó.
