LUXEMBURGO, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
La UE acordó hoy la instalación de sistemas de identificación automáticos (AIS) en embarcaciones de hasta 15 metros de eslora y rechazó establecer puntos costeros concretos que puedan actuar como puertos refugio como elementos que incluirá la directiva sobre la puesta en marcha de un sistema comunitario de seguimiento del tráfico de embarcaciones e información.
El Consejo de Transportes determinó que la instalación de los sistemas de identificación se hará en los barcos de un máximo de 15 metros de eslora, que era la propuesta que figuraba en la proposición inicial de la Comisión Europea y que también defendía España, frente a las opciones de otros Estados miembros, que apostaron por su instalación en embarcaciones de 18 y 24 metros de eslora.
El sistema AIS permitirá una señalización de las embarcaciones en alta mar, para evitar que sean arrolladas por naves más grandes. El comisario de Transportes, Jacques Barrot, lo defendió para evitar que "cada año se pierdan las vidas de marinos en Europa debido a colisiones o abordajes, particularmente por navíos mercantes".
Agregó que el AIS es "un medio eficaz de reforzar la prevención de las colisiones en el mar", que debe aplicarse "particularmente a los pequeños buques que a menudo son difícilmente detectables por los rádares de otros barcos".
Defendió la opción de los 15 metros frente a esloras mayores porque indicó que "contentarse con los de 18 metros excluiría más de 3.000 de las embarcaciones más vulnerables".
Otro de los puntos relativos al sistema de identificación era determinar quién deberá correr con los gastos de su fabricación e instalación. El Consejo decidió finalmente que el gasto será sufragado por pescadores y armadores, si bien podrán optar a ayudas comunitarias en el marco del Fondo Europeo de la Pesca, cuando sea aprobado.
No obstante, el comisario indicó a este respecto que "el precio de estos equipamientos es modesto y disminuye regularmente".
PUERTOS REFUGIO
Por otra parte, los Estados miembros debatieron acerca de la propuesta de la Comisión para clarificar las disposiciones de la directiva existente con el fin de garantizar que "los buques en dificultades puedan arribar inmediatamente a un lugar de refugio".
La Comisión proponía establecer una lista de lugares que pudieran operar como puertos refugio, una iniciativa que no salió adelante. Los Estados miembros votaron en contra, entre ellos España, que según fuentes comunitarias, defendió que toda la costa española es susceptible de ser lugar de refugio, de manera que no sea necesario establecer puntos concretos.
Los Estados miembros tampoco dieron su acuerdo a la intención del Ejecutivo comunitario de que la autoridad responsable de tomar la decisión de autorizar la entrada de un barco con dificultades a un puerto o decretar su alejamiento de la costa sea "independiente" de "presiones locales" para actuar en un sentido o en otro.
Los Veinticinco acordaron que esta autoridad seguirá siendo "competente", pero nombrada por la administración, por tanto, en lugar de "independiente".
