BRUSELAS, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los expertos veterinarios de la Unión Europea acordaron hoy endurecer las restricciones a la exportación de carne y animales procedentes de Reino Unido tras confirmarse un nuevo brote de fiebre aftosa en el condado de Surrey, a 50 kilómetros de donde se detectaron los brotes de agosto. La decisión se toma sólo un día más tarde de que los Veintisiete pactaran suprimir todas las restricciones al ganado y la carne británicos a partir del 9 de noviembre al considerar que la situación estaba controlada.
Durante la reunión del Comité Permanente de la Cadena Alimentaria, el representante británico informó a la Comisión y a los Estados miembros sobre la situación de la enfermedad y explicó las medidas que se han adoptado en respuesta al brote, según explicó el Ejecutivo comunitario en un comunicado.
Tal y como establece la legislación comunitaria, todos los animales de la granja infectada están siendo sacrificados y se ha establecido una zona de protección de 3 kilómetros y otra zona de vigilancia de 10 kilómetros alrededor de la zona afectada. En ambas se están aplicando estrictas limitaciones de movimiento y medidas de bioseguridad, y además se prohibido de nuevo en Reino Unido el movimiento de todos los rumiantes y cerdos.
El Comité Permanente extendió además la calificación de Reino Unido como zona de alto riesgo de fiebre aftosa hasta el 15 de octubre, fecha sujeta a revisión. Ello significa que los animales vivos susceptibles de sufrir fiebre aftosa no pueden exportarse a otros países ni tampoco los productos derivados excepto en casos muy limitados.
Del mismo modo, no podrán enviarse animales vivos a Reino Unido desde otros Estados miembros. Se permite que Irlanda del Norte siga exportando animales y carne siempre que vayan acompañados de un certificado sanitario y que se avise a las autoridades veterinarias del país de destino al menos con tres días de antelación. La Comisión se mantendrá en estrecho contacto con las autoridades de Reino Unido para hacer un seguimiento del brote durante los próximos días.
Los expertos veterinarios aprobaron también otras decisiones sobre medidas de control de enfermedades animales. En concreto, dieron luz verde a una nueva zona de vigilancia en Alemania tras haberse detectado un nuevo brote de gripe aviar y prolongaron las medidas contra la peste porcina en Rumanía y Bulgaria.
Finalmente, el Comité Permanente acordó extender las zonas de protección frente a la lengua azul en Francia y Alemania por la detección de más casos del virus en regiones de ambos países que hasta ahora no se habían visto afectadas. Por primera vez, la zona de restricción cubrirá además parte de la República Checa.
