BRUSELAS, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y el presidente kazajo, Nursultan Nazarbayev, firmaron hoy un protocolo de acuerdo cuyo objetivo es estrechar las relaciones entre la UE y Kazajistán en materia de energía en lo que se interpreta como un intento de Bruselas de reducir su dependencia energética respecto a Rusia.
Kazajistán es uno de los principales proveedores de energía del mar Caspio. Sus reservas de petróleo se estiman en 9.000 millones de barriles y las de gas natural en cerca de 2 billones de metros cúbicos. También posee el 20% de las reservas mundiales de uranio, lo que le convierte en el tercer productor.
El protocolo firmado hoy tiene como objetivo reforzar la cooperación en materia de seguridad de suministro y en el dominio industrial. Ello se llevará a cabo a través de intercambios regulares de información sobre las políticas energéticas respectivas, cooperación en materia de infraestructuras de transporte de energía de interés público, y tecnologías respetuosas con el medio ambiente.
La UE ya ha firmado acuerdos del mismo tipo con otros grandes países proveedores o de tránsito como Azerbaiyán o Ucrania, y está negociando uno idéntico con Argelia.
Durao Barroso reiteró que garantizar la seguridad de suministro es "prioritario" para la UE y que por eso da "mucho valor" a Kazajistán como socio y está dispuesto a estrechar las relaciones. El presidente de la Comisión elogió la política de Nazarbayev para garantizar la "armonía religiosa y étnica" en el país y reconoció el "progreso en el proceso de democratización", aunque reclamó más reformas políticas.
Por su parte, el presidente kazajo consideró el acuerdo como un "paso importante" para desarrollar las relaciones bilaterales entre la UE y su país y destacó que la energía ocupa un lugar cada vez más importante en las negociaciones. Añadió además que Kazajstán está dispuesto a diversificar las rutas de aprovisionamiento para garantizar la llegada de la energía a la UE.
La reunión entre Barroso y Nazarbayev no estuvo exenta de polémica, ya que el presidente kazajo aseguró que el portugués había expresado el apoyo de la UE para que Kazajstán asuma la presidencia de la OSCE en 2009. El presidente de la Comisión negó que le hubiese respaldado y dijo que es una cuestión que tiene que resolver la propia OSCE. El secretario de Estado de Asuntos Europeos, Alberto Navarro, dijo que España sí apoya las aspiraciones de Kazajistán.
Durante la visita se firmó también un acuerdo de cooperación entre la UE y Kazajistán en el dominio de la utilización pacífica de la energía nuclear.
