BRUSELAS, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea y la OTAN expresaron hoy su pésame por la muerte del presidente de Kosovo, Ibrahim Rugova, del que destacaron su lucha por los derechos de los kosovares y su oposición a la violencia, y pidieron a todos los partidos políticos y ciudadanos de la provincia que mantengan este legado pacifista durante las negociaciones sobre el estatuto final de Kosovo, que desde la guerra de 1998-99 está administrado por la ONU pero aspira a la independencia.
El Alto Representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad Común, Javier Solana, destacó que, con la desaparición de Rugova, "Kosovo ha perdido a un líder histórico que dedicó su vida a proteger y promover los derechos de los ciudadanos de Kosovo".
"El presidente Rugova era un hombre de paz, firme frente a la opresión, pero profundamente comprometido con los ideales de la no violencia. Por ello era querido por su pueblo y respetado en todo el mundo", subrayó a través de un comunicado.
Solana afirmó además que la muerte de Rugova se produce en un momento "particularmente complicado" para Kosovo, y que se echará en falta "su sabiduría y su autoridad". "En este momento difícil, quiero lanzar un llamamiento a todos los líderes de Kosovo para que muestren unidad y responsabilidad. Esta es la mejor manera de rendir homenaje a la memoria del presidente Rugova", concluyó.
También la ministra de Asuntos Exteriores austriaca y presidenta de turno del Consejo, Ursula Plassnik, destacó en nombre de los Veinticinco que, durante su "excepcional carrera política", Rugova luchó "incansablemente" por el interés de Kosovo. "En tanto que defensor incondicional y firme del principio de la no violencia, llevó a cabo sus esfuerzos a través del diálogo político", destacó.
"En un momento en el que se negocia el futuro estatuto de Kosovo, pedimos a todas las partes que conserven su legado político a la hora de cooperar y encontrar una solución que traiga paz, prosperidad, seguridad y estabilidad duradera a Kosovo y a todos sus ciudadanos", dijo Plassnik.
En nombre de la Comisión, su presidente, José Manuel Durao Barroso, destacó que Rugova era un líder "altamente respetado", especialmente por "su trabajo para una solución pacífica a los problemas de Kosovo". Por ello, animó a todos los líderes de la provincia a continuar trabajando "en este espíritu".
El secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer, señaló que Rugova será recordado como "un hombre comprometido con la idea de un Kosovo plenamente democrático, pacífico y multiétnico". "La oposición del señor Rugova a la violencia era valiente y extraordinaria", subrayó.
A su juicio, sirvió "con convicción" a los kosovares "hasta el final" y jugó un "papel clave" a la hora de ayudar a Kosovo a seguir "el largo y a menudo doloroso camino hacia la reconciliación, la paz duradera y la estabilidad". "Confío en que su ejemplo continúe guiando a los ciudadanos de Kosovo en estos momentos importantes y en el futuro", concluyó.
