UE.- La UE pide a Rusia un calendario para levantar el embargo a la carne polaca

Actualizado: miércoles, 9 mayo 2007 21:26

BRUSELAS, 9 May. (EUROPA PRESS) -

La presidencia alemana de la Unión Europea y la Comisión exigieron hoy a Rusia un calendario para levantar el embargo a la carne polaca con el fin de poder lanzar, en la cumbre que se celebra el próximo 18 de mayo en la ciudad rusa de Samara, las negociaciones de un nuevo Acuerdo de Asociación entre Bruselas y Moscú, que tendrá un capítulo específico dedicado a la energía. Polonia veta el inicio de estas negociaciones en protesta por el embargo ruso.

El pleno de la Eurocámara dedicó un debate a las relaciones entre la UE y Rusia en el que todos los grupos políticos respaldaron a Estonia en su enfrentamiento con Moscú por la retirada de la estatua de homenaje a los soldados soviéticos del centro de Tallin, aunque sólo los liberales pidieron el aplazamiento de la cumbre de Samara.

El ministro delegado de Asuntos Europeos de Alemania, Günther Gloser, destacó ante los eurodiputados que la presidencia alemana desea que en la cumbre de Samara se lancen las negociaciones para el nuevo Acuerdo de Asociación.

"Ha llegado la hora de que Rusia ponga fecha al levantamiento de ese embargo a las importaciones polacas", señaló el representante alemán, que insistió en la necesidad de que este Acuerdo recoja un capítulo sobre energía que fije "reglas fiables" y evite interrupciones de abastecimiento.

Por su parte, el vicepresidente de la Comisión y responsable de Industria y Empresa, Günter Verheugen, recalcó que tanto Rusia como la UE tienen interés en firmar el nuevo Acuerdo de Asociación y dijo que el embargo a la carne polaca es "desproporcionado e injusto". "Esperamos que haya una señal clara y constructiva, que nos den un calendario en el que vaya a levantarse esa prohibición", apuntó. A su juicio, la cumbre de Samara debe servir también para crear un "mecanismo de alerta temprana" que evite los cortes de suministro a la UE y que incluya también a los países de tránsito.

Tanto la presidencia alemana como el Ejecutivo comunitario afirmaron que durante la cumbre del 18 de mayo se abordará la cuestión del cambio climático y se tratará de convencer a Rusia de que se sume a la iniciativa de la UE de elaborar un acuerdo internacional que entraría en vigor a partir de 2012, cuando venza el protocolo de Kyoto, y que introduciría el objetivo de que los países industrializados recorten un 30% sus emisiones de efecto invernadero de aquí a 2020 respecto a los niveles de 1990.

En cuanto al resto de cuestiones que se abordarán en la cumbre de Samara, Gloser indicó que la UE ve con "preocupación" el anuncio de Moscú de suspender un tratado militar en protesta por la instalación del escudo antimisiles de Estados Unidos en Polonia y la República Checa. "En el debate sobre el escudo antimisiles hay que hacer todo para evitar que haya una escalada en la desconfianza y consolidar la cooperación práctica", dijo. También se abordará el futuro estatuto de independencia tutelada Kosovo, que Rusia amenaza con vetar en el Consejo de Seguridad de la ONU.

El representante de la presidencia alemana explicó además que la UE hará llegar al presidente ruso, Vladimir Putin, su "preocupación" por los retrocesos que está viviendo Rusia en materia de libertad de expresión y Derechos Humanos y por la dura represión policial de las recientes manifestaciones en San Petersburgo y Moscú, así como la situación en Chechenia.

SOLIDARIDAD CON ESTONIA

Tanto Gloser como Verheugen defendieron que la Unión Europea ha actuado correctamente en la crisis entre Estonia y Rusia y ha expresado toda su "solidaridad" a Tallin. "Estonia puede fiarse de solidaridad de sus socios de la UE en este conflicto", dijo Verheugen, que insistió en Moscú no logrará dividir a los Estados miembros y en que la solidaridad continuará "si sigue habiendo actos de injerencia, ataques informáticos o llamamientos a que dimita el primer ministro de Estonia".

En la misma línea se expresaron los portavoces de los distintos grupos políticos. Por parte del Partido Popular Europeo, Joseph Daul, que calificó de "inaceptable" la actitud de Moscú ante Estonia y dijo que se trata de un "ataque contra la soberanía de un Estado de la UE que exige una reacción". "No va a conseguir dividirnos, hoy todos somos estonios", remachó.

El vicepresidente del grupo socialista, Hannes Swoboda, dijo que todo su partido respalda plenamente a Estonia y rechaza cualquier intervención por parte de Rusia. "Lo que ha sucedido no es sólo una ofensa contra el país y la inmunidad de embajadas sino contra toda la población", subrayó.

Pero sólo el líder de los liberales, Graham Watson, se atrevió a ir un paso más allá y pidió "posponer la cumbre hasta que Rusia esté dispuesta a retomar una relación constructiva con la UE". "Rusia necesita una señal clara de hasta aquí hemos llegado (...) Estar junto a Estonia y Polonia, la solidaridad, es más importante que los tratos de gas y petróleo", destacó.

En el mismo sentido se expresó el portavoz de los Verdes, Daniel Cohn-Bendit, aunque sin llegar a ser tan contundente ni pedir el aplazamiento de la cumbre. Cohn-Bendit repitió su "solidaridad" con Tallin pero recalcó también que en Estonia hay un problema que está sin resolver que es precisamente el de la minoría rusa.

Durante el debate intervinieron dos eurodiputados de Estonia, el popular Tunne Kelam y la liberal Siiri Oviir. Los dos defendieron la "soberanía" de Estonia para decidir sobre su propio pasado sin la interferencia de Rusia y agradecieron la solidaridad de la UE en esta crisis.