MADRID, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -
Al menos 740 personas, de las cuales un 30 por ciento son niños, han contraído el virus del ébola en el marco del último brote registrado en República Democrática del Congo (RDC), según un balance del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
El pasado 1 de agosto, RDC anunció un nuevo brote de ébola, apenas una semana después de que declarara el fin del anterior, que comenzó en abril. El último brote ha dejado hasta el momento 460 muertos y otras 258 personas han sobrevivido al virus.
El representante de UNICEF en RDC, Gianfranco Rotigliano, ha asegurado que la organización ha podido controlar la enfermedad "en gran medida" en algunas áreas. Sin embargo, ha advertido de que en la zona de Butembo el virus continúa propagándose "en gran parte debido a la inseguridad y al movimiento de la población".
"Estamos ampliando nuestra respuesta y desplegando personal adicional en las zonas de Butembo y Katwa, donde se ha registrado el 65 por ciento de los nuevos casos de ébola", ha indicado Rotigliano.
Más de 650 miembros de UNICEF trabajan junto con el Gobierno, la sociedad civil, iglesias y organizaciones no gubernamentales para ayudar a las personas y familias afectadas por el virus para evitar la propagación del ébola.
"Nuestros equipos en Mangina, Beni, Oicha, Komanda, Butembo y Lubero están trabajando incansablemente con este enfoque múltiple para poner fin al brote de ébola lo más rápido posible y para ayudar a los niños y familias afectados", ha recalcado Rotigliano.
