MADRID, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Información y Comunicación de Venezuela, Jorge Rodríguez, ha anunciado este miércoles que el Gobierno de Nicolás Maduro se dirigirá al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) para explicar en detalle la atención que brinda desde hace años a los migrantes procedentes de otros países latinoamericanos.
Rodríguez ha defendido en rueda de prensa que "Venezuela es el país que más refugiados ha recibido y sigue recibiendo en la región". "Un total de 6.500.000 extranjeros --5.600.000 colombianos, 400.000 ecuatorianos y 500.000 peruanos-- se benefician con los programas sociales del Gobierno bolivariano", ha precisado.
En concreto, el portavoz gubernamental ha querido destacar la situación de la comunidad colombiana, el grupo extranjero más numeroso en Venezuela, que en su mayoría se encuentra en el país vecino a causa del conflicto armado con las guerrillas.
"A ningún colombiano se le ha tratado mal por el hecho de ser extranjero, muy al contrario a lo vivido por los venezolanos en el exterior", ha destacado Rodríguez desde el Palacio de Miraflores, sede del Gobierno, de acuerdo con los medios locales.
Venezuela está bajo la lupa de sus vecinos latinoamericanos porque, según cifras de la ONU, más de 1,6 millones de venezolanos han cruzado la frontera en los últimos tres años para escapar de la crisis política y económica que sufre la nación caribeña.
A medida que la crisis ha empeorado el flujo migratorio se ha intensificado y los países receptores, que hasta ahora han mantenido las fronteras abiertas, han comenzado a fortalecer los controles. Brasil, por ejemplo, ha anunciado este miércoles el despliegue de militares en la línea limítrofe.
Colombia, Ecuador y Perú, los que más venezolanos acogen, han iniciado los contactos para dar una respuesta coordinada. El Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) celebrará el 5 de septiembre una sesión extraordinaria para abordar la crisis migratoria, a petición del secretario general de la OEA, Luis Almagro.
Las agencias de Naciones Unidas han advertido de que, si la comunidad internacional --incluidos los países de la región-- no actúa ya de forma coordinada para ayudar a los migrantes venezolanos, esta crisis podría igualar pronto a la del Mediterráneo.
Maduro, por su parte, ha restado importancia a la magnitud del éxodo venezolano. "Dejen de lavar pocetas (váteres) en el exterior", dejen de ser "esclavos económicos" de la "oligarquía" del subcontinente, y "vengan a vivir la patria", les ha exhortado.
