BAGDAD, 25 May. (Reuters/EP) -
Las últimas cifras dadas a conocer por el Ejército de Estados Unidos revelan que la violencia en Irak ha caído a su nivel más bajo en los últimos cuatro años, aunque las autoridades iraquíes insisten en que los avances logrados son aún frágiles y reversibles.
El Ejército de Estados Unidos difundió cifras que muestran que los incidentes de violencia, incluyendo ataques con bomba de carretera, tiroteos y ataques con mortero, han caído a su nivel más bajo desde la semana del 26 de marzo del 2004.
Según los últimos datos a los que tuvo acceso Reuters, la cifra de incidentes en la semana que concluyó el 23 de mayo fue de unos 300, en comparación con los casi 1.600 registrados a mediados de junio del 2007. "Por razones de seguridad no podemos dar cifras exactas, por lo que estos son números aproximados", explicó un portavoz militar, el mayor John Hall.
Hall atribuyo el descenso de la violencia al aumento en las capacidades de las fuerzas de seguridad iraquíes y su mayor participación en operaciones de contra insurgencia, la formación de unidades de patrullaje árabes suníes y al alto el fuego declarado por el clérigo Muqtada al Sadr. "Hay avances significativos pero desiguales en Irak. Los niveles de violencia y muertes civiles se han reducido sustancialmente", declaró Hall. "Al Qaeda en Irak y otros elementos extremistas han sufrido fuertes golpes", agregó.
La última ofensiva contra Mosul de las fuerzas de seguridad iraquíes con el apoyo de la coalición internacional liderada por Estados Unidos habría acabado con gran parte de la insurgencia en el país, ya que el Ejército norteamericano consideraba esta ciudad del norte de Irak el último bastión urbano de Al Qaeda en Irak.
El embajador de Washington en Irak, Ryan Crocker, declaró incluso que Al Qaeda en Irak nunca ha estado más cerca de la derrota. Estados Unidos considera al grupo como la mayor amenaza para la paz en Irak y lo ha responsabilizado de la mayor parte de los atentados suicidas.
