Washington y Seúl planean reducir los ejercicios militares conjuntos por el nuevo coronavirus

El secretario de Defensa estadounidense, Mark Esper.
El secretario de Defensa estadounidense, Mark Esper. - Sven Hoppe/dpa
Publicado: martes, 25 febrero 2020 6:06

MADRID, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -

Corea del Sur y Estados Unidos planean reducir sus ejercicios militares conjuntos en el marco de la preocupación por el brote del nuevo coronavirus en el país asiático, que ya ha registrado ocho muertes y 833 casos, según ha indicado el secretario de Defensa estadounidense, Mark Esper.

Esper, que ha trasladado este planteamiento tras una reunión mantenida con el ministro de Defensa surcoreano, Jeong Kyeong Doo, en el Pentágono, alude posiblemente a unos ejercicios de entrenamiento simulados por ordenador que ambos países habían planteado para marzo, según ha indicado la agencia de noticias surcoreana Yonhap.

En concreto, el secretario de Defensa ha precisado que son el comandante de las Fuerzas Armadas Estadounidenses en Corea del Sur (USFK, por sus siglas en inglés), el general Robert Abrams, y el jefe del Estado Mayor Conjunto (JCS, por sus siglas en inglés), el general Park Han Ki, son los que están considerando reducir los entrenamientos del puesto de mando debido al brote de coronavirus.

Jeong, por su parte, ha señalado que los generales están estudiando la situación "seria" que ha causado el virus, pero no ha confirmado lo dicho por Esper. Asimismo, ha agregado que Seúl y Washington decidirán la forma de llevar a cabo los ejercicios militares después de completar una evaluación conjunta.

Corea del Sur ha registrado durante los últimos días un incremento significativo de los casos de coronavirus en su territorio. En el país hay dos focos de infección, una en la comarca de Cheongdo y otra en una secta religiosa en la localidad de Daegu. Ambas han aumentado considerablemente y representan más de la mitad del total de casos en el país.

El país elevó el domingo el nivel de alerta del virus a "rojo", el más alto, lo que supone la primera vez que se decreta este nivel desde el brote de gripe porcina H1N1 en 2009.

La decisión otorga a las agencias de emergencia "poderosas competencias sin precedentes" para contener la enfermedad. Además supone el aplazamiento por el momento por una semana del inicio del nuevo curso escolar previsto para marzo.