HARARE, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
El líder del partido Movimiento para un Cambio Democrático, la principal formación en la oposición en Zimbabue, Morgan Tsvangirai, fue detenido hoy junto a otros cinco miembros cuando se reunieron para rezar en la capital, Harare.
La Policía blindó carreteras y se enfrentó a simpatizantes de la oposición echando mano de bombas de gas lacrimógeno y cañones de agua, según explicaron activistas de la oposición, citados por la cadena británica BBC, que se reunieron para impulsar una manifestación --convocada por la 'Campaña Salvar a Zimbabue', una coalición de grupos de Derechos Humanos, religiosos y grupos políticos-- desobedeciendo la prohibición que durante tres meses decretó el Ejecutivo de Zimbabue en contra de las reuniones públicas o políticas.
Según la BBC, los seis arrestados permanecen bajo custodia en la comisaría de Policía de Highfields. Por su parte, un consejero de Tsvangirai, Eliphas Mukonoweshuro, censuró las detenciones porque la manifestación, dijo, "no es política", por lo que, su celebración, insistió "no requería de la obtención de ningún permiso de la Policía". "Pero la policía siguió adelante y arrestó a un amplio abanico de líderes de organizaciones civiles, partidos políticos, sindicales y estudiantes", explicó.
En este sentido, testigos pro Derechos Humanos, citados por Associated Press, en Highfield informaron de al menos 100 detenciones practicadas en la jornada de hoy, muchos líderes políticos, incidieron, fueron obligados a bajar de sus vehículos en las inmediaciones del recinto deportivo de Harare donde se desarrolló la liturgia.
Por su parte, uno de los líderes de una facción política opositora, Arthur Mutambara, fue detenido para interrogarle, junto con otros líderes políticos y clérigos, acusados de desafiar la prohibición de manifestaciones públicas, según explicó a los medios el portavoz opositor, Maxwell Zimuto.
Entre los detenidos, además de Tsvangirai, fueron arrestados un alto miembro de otra de las facciones en la oposición, Tendai Biti, el portavoz de Tsvangirai, Nelson Chamisa, así como el líder de la Asamblea Nacional Constitucional, un partido reformista, Lovemore Madhuku.
La economía del país pende de un hilo. La inflación en Zimbabue alcanzó en enero la cifra récord de 1.593,6 por cien, la mayor del mundo, mientras su presidente, Robert Mugabe, negó que haya provocado la crisis económica que vive la nación africana. La electricidad, el gas y otros combustibles fueron los artículos que contribuyeron más a alcanzar esta tasa de inflación según la Oficina Central de Estadísticas. Respecto al mes anterior, diciembre de 2006, la inflación creció un 45,4 por ciento.
Sin embargo, los críticos culpan al presidente de haber arruinado la economía del país por sus políticas, como por ejemplo la expropiación de tierras a los blancos. Mugabe asegura que son los países occidentales los que han saboteado la economía del país para castigar el hecho de que el Gobierno haya expropiado las tierras a los blancos. Hay que recordar que el presidente Mugabe realizó una confiscación de tierras, en el año 2000, que dejó la economía agrícola en declive. Ante la resistencia de los campesinos, Mugabe lanzó una de sus frases más recordadas, al advertirles de que "seré un Hitler negro, multiplicado por diez".
